Consultoras privadas destacan "gradualismo" en proyecto de Presupuesto 2018

La Asociación Argentina de Presupuesto y Administración Financiera Pública (ASAP) evaluó que la iniciativa “mantiene la estrategia del Gobierno de reducir el déficit gradualmente” (3,2 por ciento del PBI en 2018). El principal factor de esta merma paulatina del déficit consistirá en la “continuidad de las políticas de disminución de subsidios económicos, mucho más marcadas en energía que en transporte”, indica el informe. Sin embargo, la consultora advirtió sobre el crecimiento previsto en los pagos de intereses de deuda, como consecuencia directa de la persistencia del déficit fiscal.

“Si el peso de los intereses se acrecienta, la política económica perderá grados de libertad, por más esfuerzos que se hagan en contener el gasto primario. No obstante, es preciso remarcar que el aumento del endeudamiento es una consecuencia directa del déficit fiscal. Si no se reduce el déficit, la deuda seguirá creciendo”, advierte el trabajo de la organización.

Por otra parte, la ASAP valoró el hecho de que la modificatoria al artículo 37 de la ley de Administración Financiero limitó las facultades del jefe de Gabinete para reestructuras partidas presupuestarias, y destacó que el porcentaje de modificaciones previsto para 2018 (2,8% del gasto) se encuentra “muy por debajo del promedio del 20% de años anteriores”. “Esto muestra que una mejor formulación, basada en supuestos macroeconómicos realistas, permite una ejecución más precisa a lo largo del ejercicio, devolviéndole al presupuesto su centralidad en el cumplimiento de la política fiscal”, concluye el documento.

La Fundación Metropolitana dio a conocer un informe que repasa los principales puntos del plan de presupuesto, al que define como de “gradualismo” económico y fiscal.

“Con ingresos corrientes en niveles similares a los de 2017 (18,8% del PIB), el gasto primario nacional se ajustará en un 1% del PIB para alcanzar un nivel del 22%. Más de la mitad del recorte ocurrirá por menos subsidios económicos (13,2% interanual). La disminución en los gastos de funcionamiento y la estabilización de los salarios en términos reales permitirán bajar el gasto primario en un 0,3% del PIB adicional”.

Fuente: NA