Crece la batalla por los clientes en el negocio local de los micropagos

La evolución tecnológica permite realizar cada vez más acciones a través de los teléfonos inteligentes. Gracias a las aplicaciones hoy se puede conocer el estado del tránsito, ver series, pedir comida o enviar dinero a través de alguna de las herramientas de los bancos. Sin embargo, a la velocidad a la que avanza las innovaciones digitales, las aplicaciones suelen quedar obsoletas rápidamente y los usuarios buscan cada vez mayor comodidad y facilidad para realizar sus tareas.

Es por esto que el segmento de micropagos comienza a tomar relevancia gracias a las soluciones integradas que presentan distintas empresas. El último lanzamiento es Itaú Key, una aplicación del banco que se integra al teclado y permite enviar dinero de forma inmediata y gratuita a través de Whatsapp o cualquier otra red social, email o SMS.

La solución es la primera en su tipo en el país, y permite hacer transacciones con un botón del teclado sin salir de la aplicación de mensajería que utiliza el usuario. Quienes la descarguen podrán enviar dinero de una caja de ahorro en pesos o en dólares, y tendrán un límite de $9.500. La empresa buscó simplificar la funcionalidad de la aplicación, por lo cual el sistema no demanda el uso de una tarjeta de coordenadas y tiene las mismas contraseñas que la cuenta de homebanking.

La elaboración del teclado de pago le llevó unos seis meses a la compañía y es parte de un programa de innovaciones tecnológicas que llevan adelante desde fines de 2016. "La transformación digital es uno de nuestros frentes prioritarios", explicó el Director de operaciones, sistemas, tecnologías y banco digital de Itaú Argentina, Rodolfo Ricci. "Para eso desarrollamos un plan de inversión de u$s30 millones a tres años, del cual ya ejecutamos 60%", indicó el directivo. La sede local del banco brasileño tiene 500.000 clientes y aseguran que 40% utiliza alguna de las apps disponibles, cifra que crece cada vez más.

Según datos de la entidad, por cada visita al banco, hay cuatro interacciones online, y estas estadísticas fueron las que impulsaron el cambio tecnológico. "Se estima que para 2025, el 75% de la masa laboral sea millennial", dijo Ricci para explicar la necesidad de innovar. "Sirve para pagos pequeños, como la plata que le debés a un amigo o pagarle al jardinero o una niñera sin la necesidad de salir de una aplicación para entrar en la del banco", ejemplificó el directivo.

Alta competencia

La solución del teclado de pago no es la única. El Banco Nación cuenta con Pim, una billetera móvil universal pensada para poder incluir a aquellos sectores que no están bancarizados. La entidad realizó una inversión de $20 millones para este sistema que funciona a través de mensajes de texto.

El usuario no tiene costo por usarlo, y como es a través de SMS, no necesita datos móviles ni cobertura de Internet. A diferencia de otras soluciones de micropagos, no demanda la instalación de ninguna aplicación y puede ejecutarse en cualquier teléfono celular, no sólo en los smartphones.

Se puede utilizar para pagar en pequeños y grandes comercios que están adheridos al sistema; para enviar dinero a cualquier parte del país; para cobrar beneficios sociales en la Anses; para pagar el Telepase; para recargar el celular o para extraer dinero en efectivo. En este caso, la transferencia máxima es de cuatro sueldos mínimos y está habilitado para mayores de 13 años.

Otra solución es Mercado Pago, que tiene como diferenciación el pago a través de un código QR para agilizar el trámite. La empresa de Marcos Galperín, permite realizar pagos a través de la aplicación -desde una tarjeta o efectivo que haya en la cuenta- y tiene como ventaja la posibilidad de tener cuotas sin interés y promociones con descuentos dependiendo del banco y el comercio

Por su parte, Visa también llevó su tecnología al Mundial de Rusia. Allí, por u$s15, los consumidores pueden adquirir pulseras y anillos de pago sin contacto para abonar sus compras.

Fuente: BAE