Demoran el ingreso de productos de Brasil para equilibrar la balanza

Producto del déficit comercial récord, el Gobierno está demorando la entrada de productos desde Brasil por encima de los 60 días permitidos por la Organización Mundial del Comercio (OMC), aplicando las licencias no automáticas (LNA) en forma lenta para maderas, calzado, prendas de vestir, juguetes, y porcelanas y cerámicos.

Fuentes de la Casa Rosada confirmaron a BAE Negocios las denuncias que partieron desde sectores industriales de Brasil. En el Ejecutivo admitieron ayer que la demora es creciente, ya que comenzó con tres meses y ahora hay casos donde superan los 120 días para la aprobación de las LNA. Por ejemplo, en la madera ya trabajada para los muebles.

Lo que para Brasil fue un superávit comercial récord el mes pasado, para Argentina representó el mayor déficit mensual bilateral de la historia, abultado por las compras de automóviles, que se reflejan en el alto consumo local, vehículos de carga y tractores al país vecino. El déficit comercial con Brasil alcanzó los u$s800 millones en julio, casi tres veces lo registrado hace un año atrás, según datos oficiales del país vecino. Ese rojo consolidó una déficit acumulado de u$s4510 millones entre enero y julio (75,1% por encima de los primeros siete meses del 2016).

El malestar de los fabricantes brasileños se comunicó por dos vías. Una, a través de canales diplomático y hacia Buenos Aires; y otra, a través de los agentes importadores que reportaron la información a la cámara CIRA. Una fuente oficial evaluó ayer que "el gobierno brasileño nunca va a reclamar por ciertas demoras, primero por el enorme superávit, y además, porque son los campeones de las barreras paraarancelarias".

A su vez, fuentes empresarias nacionales, que participaron de reuniones con diversos funcionarios, coincidieron que se plantean situaciones tanto de cupos como de dilación en la habilitación de las licencias no automáticas, una práctica habitual en las relaciones comerciales.

Aunque no hay reuniones previstas, el Gobierno espera que a un grupo de terminales automotrices empiecen a compensar el abuso de sus importaciones desde Brasil.

Fuentes oficiales señalaron a BAE Negocios que “vamos a seguir muy de cerca el cumplimiento del Flex (relación entre importaciones y exportaciones con Brasil). Ya se sabe que habrá un castigo para las que no bajen las importaciones o aumenten las exportaciones”.

Respecto del punto más álgido de la agenda como es el Flex, desde el Gobierno dijeron que “conocemos cómo es la situación (automotrices que importan muy por encima del acuerdo bilateral) y van a tener que enderezarse”.

Fuente: BAE