Elecciones municipales en Brasil condicionan reformas de Temer
El domingo Brasil tendrá sus primeras elecciones después de la destitución de Dilma Rousseff, y de acuerdo con las encuestas, el PT obtendrá resultados muy pobres, mientras que los que crecerán serán partidos que tienen poca definición ideológica.
El PT logró en las elecciones municipales de 2012 el mayor número de gobiernos locales de su historia: 642, pero desde ese entonces perdió más de 100, debido a que varios alcaldes dejaron el partido, y se prevé que después del domingo la cifra se reduzca a la mitad.
Los líderes del PT en las distintas regiones han reconocido públicamente que la pérdida del gobierno central y las investigaciones judiciales derivadas de la red de corrupción de Petrobras -que en su mayoría están dirigidas a ese partido, aunque hay otros involucrados- han afectado de forma negativa la intención de voto de sus candidatos. “Está cada vez más claro que hay una acción con fines electorales por parte del Ministerio Público y el Poder Judicial”, aseguró el presidente del PT en San Pablo, Emídio de Souza.
Pero esta caída no será aprovechada por sus principales opositores, el Partido del Movimiento Democrático Brasileño (PMDB) del presidente Michel Temer y el Partido de la Social Democracia Brasileña (PSDB), que según los sondeos obtendrán un número de alcaldías similar al que lograron en 2012.
En cambio, los que crecen son los partidos denominados del centro. De los 35 partidos políticos representados en el Congreso brasileño, unos quince están cubiertos por esta denominación, que incluye a todas las formaciones que no tienen una ideología política clara sino que toman decisiones en función de alianzas políticas y de los intereses que representan. Entre ellos se incluyen los partidos religiosos, los vinculados con los agronegocios y los identificados como “BBB”, por Biblia, buey y bala. El que más crecimiento ha mostrado es el Partido Republicano Brasileño (PRB), que fue fundado en 2005, y al cual pertenecía José Alencar, que fue vicepresidente de Lula.
En stand by En tanto, el presidente Temer, decidió postergar la discusión de una propuesta de reforma a la ley previsional que es rechazada desde todos los polos sociales, ante la caída en las encuestas de su candidata a la alcaidía de San Pablo, Marta Suplicy, quien atribuyó la pérdida de su caudal electoral a la “agenda maldita” del jefe del estado.
El mandatario se reunió con legisladores y ministros a los que anunció la decisión de postergar el debate sobre la reforma previsional hasta después de los comicios en los que se elegirán 5.600 alcaldes, el próximo domingo.
El proyecto de ley de reforma previsional ya está listo, e iba a ser enviado al Congreso esta semana. Pero el Ejecutivo cedió a presiones sectoriales y antes pedirá opinión sobre la propuesta a sindicatos y empresarios, informó el ministro de la Secretaría de Gobierno, Geddel Vieira Lima.
“Fuimos atropellados por los acontecimientos, inclusive la propia elección (municipal) de este domingo que impidió hacer a tiempo el debate que queríamos con sindicatos, núcleos empresariales y con los líderes parlamentarios”, admitió el funcionario.
Fuente: Diario BAE