La CGT se reúne por tercera vez con el el FMI y se profundiza la división entre los gremios

La diáspora sindical suma un capítulo con más con el encuentro que referentes de la CGT mantendrán hoy con el FMI. Sin lugar a sorpresas, los dialoguistas departirán con el organismo que lidera Christine Lagarde mientras que sus pares alineados en la resistencia redoblan consignas por un paro nacional. En esa primera línea del Frente Sindical que comandan Hugo y Pablo Moyano, el canillita Omar Plaini refrendó que la reunión con el Fondo Monetario "no es una imagen esperable de esa central".

Será la tercera ocasión que se tiende una mesa entre el FMI y la CGT en la era Cambiemos, el condimento de esta última es su retorno desde un rol potenciado más allá de la supervisión de la economía nacional, sino dictando pautas de gestión como reducción de jubilaciones mínimas y elevar el tope de edad para el final del ciclo laboral de mujeres y hombres.

La visión del sindicalismo más reacio a la paz absoluta con la Casa Rosada se resume también en labor de "canciller" que Plaini abordó mucho antes del 10 de diciembre d 2015 entre sectores enfrentados respecto a la gestión Cambiemos. En las contadas coincidencias que sí son compartidas con Azopardo realza que las soluciones "son políticas y no sindicales" ante una "crisis en gran parte autoinflingida" por el Ejecutivo Nacional.

Sin necesidad de apelar a metáfora, Plaini le señaló a BAE Negocios que "no hay que apelar a grandes tratados de política o filosofía, para los trabajadores de a pie es una muy mala señal desarrollar un encuentro de estas características". En sintonía con lo que vienen remarcando otros referentes del FS, como el bancario Sergio Palazzo, uno de los tres comandantes de la Corriente Federal (CFT), o el propio Pablo Moyano, la inmediatez se resume en tomar una decisión y activar una huelga nacional. El costo asumido para el núcleo que representan los tres dirigentes nombrados es indisimulable. Abrirán la compuerta principal para que la Casa Rosada se victimice, pese a lo que consideran que la coyuntura no deja lugar a otro tipo de medidas.

Hugo Yasky, titular de la CTA de los Trabajadores revalidó un pensamiento ya expresado ante este diario meses atrás y que considera, no perdió vigencia: "Hay alternativas donde importa menos que nos acusen de desestabilizadores o que algunos aprovechen para ponerse en víctimas que no asumir la responsabilidad que tenemos como representantes de los compañeros y compañeras trabajadores".

En tanto, la cúpula de Azopardo mantendrá una reunión con los especialistas del FMI sobre el mediodía y en la sede de la Unión Obrera de la Construcción ( UOCRA) de Gerardo Martínez, sede sindical que ya ofició de escenario para otros encuentros en tiempos de crisis, que incluyen aquella terapia intensiva que encarnó el ministro Rogelio Frigerio para intentar contener -sin éxito- el derrumbe de la actividad en la construcción, ante empresarios y el propio Martínez, meses atrás.

Luego de amables charlas con presidenciables y otros, la misión del FMI estará al mando de Roberto Caldarelli, que se sentará a la mesa con uno de los secretarios generales de Azopardo, Héctor Daer, y otros responsables de la central como Andrés Rodríguez ( UPCN), José Luis Lingeri (Obras Sanitarias), y Omar Maturano ( La Fraternidad).

Fuente: BAE Negocios