La cartera laboral activa la regulación del teletrabajo

La coordinadora del Area de Teletrabajo de la cartera laboral, Viviana Díaz, trabaja en la faz final de la elaboración de un proyecto de ley que regule la actividad a la distancia realizada a partir de las posibilidades de integración al sistema productivo que brindan la informática y las comunicaciones.

El objetivo de la iniciativa, que en breve ingresará en el Congreso, será asegurar el cumplimiento de los derechos laborales, en los casos en los que se aplica el denominado teletrabajo.

"Queremos dar continuidad a un proceso generado desde el ministerio, a partir del progresivo crecimiento del teletrabajo como una oportunidad laboral, un mecanismo de integración y una posibilidad de inclusión social", según el jefe de la cartera laboral, Carlos Tomada.

"Es un terreno donde estamos logrando la atención de sectores con dificultades para la inserción laboral, a partir de esta forma de organizar el trabajo", sostuvo el ministro.

El marco normativo de esa modalidad de empleo, posible a partir del uso de tecnologías de información y comunicación, fue estudiado en forma compartida con empresarios, sindicatos y académicos.

A tal efecto ya se constituyó una red de empresas, que han hecho del teletrabajo una de las formas de organizar la prestación de sus servicios.

Esta Red de Empresas de Teletrabajo colabora con la gestación del proyecto de Ley.

La necesidad de fortalecer y regular el teletrabajo obedece a que los trabajadores estén seguros con los derechos que le corresponden, tanto en seguridad e higiene.

La iniciativa va en la misma línea de los proyectos de trabajo rural, de trabajadores en casas particulares y la regulación que asegura los derechos de los canillitas.

El sistema de teletrabajo demostró que mejora la productividad laboral, respeta los derechos y eleva la productividad social, ya que amplía el tiempo disponible de los trabajadores para sus familias e intereses particulares.

Para los empleadores permite importantes ahorros en gastos de infraestructura, instalaciones de sistemas operativos en oficinas centralizadas, equipamiento, mobiliarios, energía, seguridad, administración, etc., lo cual libera un capital que puede ser aplicado a invertir en la expansión de los programas.

Para las pymes posibilita la tercerización de funciones y desarrollos dinámicos para poder competir con unidades productivas mayores, que tienen posiciones dominantes en los mercados.

Y para el Estado representa un alivio en cuanto al desplazamiento diario de una masa de trabajadores que viaja desde la casa a la oficina y regreso, tanto en lo referente al servicio del transporte, como al congestionamiento de los accesos a las fuentes de trabajo, generalmente ubicadas en radios céntricos de las grandes ciudades.

Las empresas que transmitieron su experiencia en la aplicación práctica de la modalidad para la elaboración del proyecto entienden que se corren las fronteras, se modifica el mundo del empleo.