La producción de las PYMES registra 20 meses en caída

La producción de las pequeñas y medianas industrias cayó 4,7 por ciento en marzo frente a igual mes de 2014 y acumularon así el derrotero de 20 meses de bajas consecutivas.

La actividad de estas empresas acumuló con los datos de marzo una caída promedio de 4,5 por ciento en el primer trimestre del año frente a igual período de 2014, según un informe de la Confederación Argentina de la Mediana Empresa (CAME).

El indicador arrojó un retroceso del 0,5 por ciento en la comparación mensual de marzo contra febrero en la medición con estacionalidad.

Los datos corresponden a la Encuesta Cualitativa Industrial mensual realizada por CAME entre 250 industrias PYMES del país.

"El panorama general para la industria pyme sigue siendo recesivo, afectado por la menor demanda, costos en alza, deterioro en la rentabilidad, dificultades para conseguir algunos insumos, y un estiramiento en la cadena de pagos que complica la situación financiera", dijo CAME.

En marzo, tres de cada diez industrias declaró que se deterioró su cadena de pagos, con atrasos preocupantes.

A su vez, la falta de insumos en algunos sectores están demorando las entregas de los proveedores y complicando la venta justo cuando más liquidez necesita el industrial.

Marzo fue un mes "regular" para el 60,8 por ciento de las industrias consultadas y entre "malo y muy malo" para el 12,2 por ciento.

Pero a pesar del contexto, hubo dos datos positivos: por un lado, se redujo la cantidad de industrias con caídas anuales en sus niveles de producción, aunque todavía son una minoría las que crecen.

Por otro, mejoraron levemente las expectativas y más empresarios esperan que en los próximos seis meses la producción pueda repuntar.

En cambio, la rentabilidad sigue comprometida, y en marzo el aumento de costos promedio industrial fue 2,7%, pero la mayoría no trasladó inmediatamente a precios finales esas subas, sino que lo irán haciendo siguiendo el pulso de la demanda.

A su vez, las inversiones siguen frenadas, y cayó a sólo 11% el porcentaje de industrias con desembolsos previstos para este año; la mayoría de esas inversiones son para ampliar la oferta y no la capacidad tecnológica.

Fuente: NA