Lacunza aseguró que, "el desendeudamiento ya es compulsivo porque nadie nos quiere prestar plata"

El exgerente general del Banco Central Hernán Lacunza evaluó hoy que la Argentina intentó despejar la incertidumbre para 2015 con el canje de los bonos Boden 2015 y colocación de nuevos títulos, pero "no lo logró" porque "nadie quiere prestarle plata al país".

El economista analizó que los bonos Bonar 2024 que había licitado el Gobierno por hasta 3.000 millones de dólares pagaban cerca del 10 por ciento anual mientras que los países vecinos como Uruguay, Chile y Brasil afrontan tasas de "menos de la mitad".

"Eso significa que Argentina no inspira confianza en el mundo y es un problema, porque entonces esto de desendeudarnos ya no es voluntario sino que es compulsivo. No es que no queremos endeudarnos sino que nadie nos quiere prestar", dijo Lacunza en radio El Mundo.

Lacunza fue despedido de la autoridad monetaria en enero de 2010 por el entonces presidente interino del Banco Central, Miguel Angel Pesce, que quedó a cargo de la institución tras la remoción por decreto de Martín Redrado.

Este economista era uno de los funcionarios de confianza de Redrado -hoy asesor y eventual candidato por el Frente Renovador que conduce Sergio Massa- y de hecho éste fue quien lo designó en la Gerencia General.

Opinó el economista que una combinación de malas noticias internacionales como la caída del precio del petróleo, datos negativos sobre China y el desplome de los mercados en general más la "escasa adhesión" al canje que logró el Gobierno la semana pasada, golpearon a la Bolsa porteña.

"El canje era una idea interesante pero la combinación del mal clima internaciconal y las fallas de diseño, de fijar por ejemplo el precio con anterioridad y no en una licitación, hicieron que de lograra una baja adhesión", sostuvo.

Lacunza evaluó que como el Gobierno intentó despejar la incertidumbre para el año que viene "y no lo logró" ahora los precios de los títulos públicos y las acciones se ven "castigados" en el mercado financiero, debido a la desconfianza de los inversores.

"Los resultados del canje fueron bastante pobres. Ir al canje no era negocio, era mejor ir al mercado convencional y hacer la misma operación pero por otra vía. Con el próximo Gobierno, con otro set de políticas, Argentina va a recuperar crédito internacional y va a poder insertarse en el mundo a tasas razonables", vaticinó Lacunza.

Fuente: NA