Nación garantizó $ 2.000 millones para el déficit previsional

En una cumbre ayer con ministros de Economía de 11 de las 13 provincias que no transfirieron su Caja de Jubilaciones a Nación, el Gobierno de Mauricio Macri se comprometió a garantizar hasta fin de año los envíos automáticos para financiar el rojo previsional -restan unos $2 mil millones- y a acelerar los cálculos -información de los distritos mediante- para terminar de cerrar el monto final de la asistencia 2017.

Pero según pudo saber este diario, los enviados de los gobernadores además pidieron un retoque en la reglamentación de la ley de 2016 -la de Reparación Histórica de los Jubilados- que define el auxilio para apagar ese déficit, ya que bajo el formato actual están obligados a armonizar al 100% los parámetros jubilatorios locales con los nacionales, de manera gradual, hasta 2020.

El malestar de los mandatarios radica en que eso los deja sin margen para definir una continuidad de algunas de las características jubilatorias locales (incluso financiándolo con recursos propios), por la amenaza concreta de quitas de fondos escalonadas ante la falta de armonización.

El mix de planteos pegotea trabas constitucionales que los obliga a pagar el 82% móvil, con duras arengas políticas en defensa del sistema jubilatorio local. Los distritos patagónicos son los que están más lejos de los parámetros nacionales.

Por eso ayer los enviados provinciales (hubo en la reunión peronistas, de Cambiemos y de fuerzas locales) acordaron elevar una propuesta alternativa a la reglamentación que ya rige.

"Quedamos en revisar el decreto reglamentario, que debe respetar la autonomía de las provincias", dijo el ministro de Hacienda cordobés, Osvaldo Giordano, en medio del pedido de Nación a los gobernadores de una "administración prudente".

Pero en despachos nacionales manejan otros tiempos: creen -dijeron a Ámbito Financiero- que esa es una discusión más a largo plazo y "no de la agenda actual", y remarcan que no derivará en tijeretazos en la asistencia para el rojo 2017. Precisamente, lo que urge -afirman- es contar con toda la información de las provincias necesaria para terminar de calcular el monto de las remesas para domar ese déficit 2017.

Para ello la ANSES debe desplegar una simulación de lo que le costaría a la Casa Rosada sostener a esos jubilados provinciales si pertenecieran a la órbita nacional. La idea es remitir a esas provincias -que no transfirieron en la década del noventa su Caja- los fondos para cubrir ese monto, para equiparlas con los distritos que sí transfirieron su Caja a la órbita nacional..

Sin embargo, en los últimos meses -destacan desde Balcarce 50- el envío de la información de las provincias se demoró, por lo que la ANSES advirtió que, de continuar los blancos, las transferencias se interrumpirían desde octubre.

Esa amenaza apuró la organización de una cumbre de gobernadores de tono combativo para el pasado jueves en la Casa de Entre Ríos, que sin embargo terminó suspendida a la espera de los resultados del encuentro de ayer.

Ahora las remesas automáticas presupuestadas quedaron garantizadas -son este año unos $8 mil millones, a cuenta del monto final-, mientras que se articularon ayer mecanismos para acelerar en los próximos días la entrega a la ANSES por parte de las provincias de la catarata de datos sobre las jubilaciones locales de los últimos 10 años.

La intención es que haya un nuevo encuentro con Nación el 4 de octubre, para poner en blanco sobre negro la información que eventualmente pueda seguir faltando, y en los casos más avanzados ponerle ya una fecha al cálculo final de las remesas 2017 para financiar el rojo previsional.

Los anfitriones del encuentro -que se desarrolló en la cartera del Interior- fueron dos funcionarios del ministro Rogelio Frigerio de amplio contacto con las provincias -Alejandro Caldarelli y Paulino Caballero-, además del subdirector Ejecutivo de Administración de la ANSES, Federico Braun.

Por la vereda de las provincias fueron de la partida, además de Giordano, los ministros de Hacienda de Chaco, Cristian Ocampo; de Corrientes, Enrique Vaz Torres; de Entre Ríos, Hugo Ballay; de Formosa, Jorge Ibáñez y de La Pampa, Ernesto Franco; y de Misiones, Adolfo Safrán. Además estuvieron el subsecretario de Hacienda bonaerense, Juan Sanguinetti, y su par de Santa Fe, Pablo Gorbán; el subsecretario de Ingresos Públicos de Neuquén, Alejandro Monteiro, y el presidente del Instituto de Seguridad Social de Chubut, Cristian Eguillor.

Esquivó así finalmente el convite el ministro de María Eugenia Vidal, Hernán Lacunza, aunque en la noche del domingo lo daban en el Gabinete bonaerense por un asistente más. De todas formas, fue la primera cumbre con provincias de la que participó Buenos Aires tras el recrudecimiento de la puja con el resto de los gobernadores en la Corte por la demanda en pos de la actualización del Fondo del Conurbano.

En cambio, directamente no hubo representantes de las mandatarias justicialistas Alicia Kirchner (Santa Cruz) y Rosana Bertone (Tierra del Fuego).

Fuente: Ambito