Senado debate sobre la creación del Banco del Sur

El oficialismo ya cuenta en el Senado con los dictámenes necesarios para tratar en el recinto el proyecto de ley impulsado por el Poder Ejecutivo que da cuenta el voto positivo del país para la creación del Banco del Sur junto con otras naciones de la región.

La iniciativa ya logró dictamen en dos comisiones, de Relaciones Exteriores, que preside Daniel Filmus, y de Economía Nacional e Inversión, a cargo de la radical Laura Montero, lo que habilitaría a tratarla el 29 de junio, como fecha tentativa.

Técnicamente, el Senado discutirá el Convenio Constitutivo, un paso que es replicado en los distintos países miembros de la Unasur.

El Banco del Sur necesita para su creación el visto bueno de los Parlamentos de una "mayoría simple" de "países fundadores" que lo integran.

Ecuador, Paraguay, Venezuela, Argentina, Brasil y Bolivia, firmaron la creación de dicho banco en diciembre del 2007, en Buenos Aires, por iniciativa del ex presidente Néstor Kirchner y del mandatario venezolano, Hugo Chávez Hasta el momento ratificaron dicho Convenio Ecuador y Venezuela, que juntos representan 2/7 de los países fundadores y el 34,3% del capital suscrito de la futura entidad multilateral regional.

Bolivia ya inició el trámite de ratificación legislativa, con lo que "podría esperarse algún resultado hacia el tercer o cuarto trimestre de este año", según estiman desde el Ministerio de Economía argentino, de acuerdo a los tiempos parlamentarios de ese país.

En rigor, el Convenio Constitutivo establece en su artículo 31 que el Banco del Sur entrará en vigencia tras "los instrumentos de ratificación de la mayoría simple de los países fundadores que, adicionalmente, en conjunto, representen más de las dos terceras (2/3) partes del capital suscripto del Banco".

El secretario de Finanzas, Hernán Lorenzino, durante la defensa del Convenio Constitutivo en el Senado efectuada en abril último, había dicho que, para el Gobierno, la aprobación del mismo representa un "gran avance en la integración y el desarrollo regional, además de contar con un organismo para financiar y prestar asistencia a los países de la Unasur".

Lorenzino explicó que la entidad financiera será "un instrumento de financiamiento distinto, pensado desde los países de la Unasur para el Unasur, y no desde el Consenso de Washington".

"Este tipo de instrumentos son los que se requieren -dijo- para aislar a los países de la región de las decisiones tomadas desde los organismos en donde pesa más el voto de los países desarrollados", sostuvo, además de explicar otras bondades que tendría el Banco para los países de la región, como el de los plazos en los préstamos.

(Telam)