POLÍTICA ECONÓMICA

Gobernadores proyectan techo paritario del 25 por ciento

En medio de la incertidumbre generada por la abrupta escalada del dólar y su impacto en los precios, los gobernadores intentan contener los redoblados reclamos salariales gremiales con la meta de ponerle un techo del 25% a los incrementos.

Ése es el escenario que por lo bajo manejan en tierra bonaerense, y que el justicialista Daniel Scioli comenzó a consensuar con otros mandatarios, para pararse con más fuerza frente a la embestida sindical.

Sobre todos ellos pesa fuerte el autoacuartelamiento policial de principios de diciembre en Córdoba y su contagio luego a buena parte del país, que derivó en forzadas subas de sueldo para la fuerza del 35% promedio, que hoy no pueden repetir para otros sectores de la administración pública.

El porcentaje que ahora barajan los Ejecutivos locales muestra un mayor grado de acercamiento a los planteos de los gremios respecto de los parámetros que intenta sostener la Casa Rosada, donde pese a la devaluación que sufrió el peso en los últimos días aspiran a cerrar aumentos de no más del 20%.

En el interior, por de pronto, las exigencias de estatales, docentes y otros trabajadores del sector público rondan del 35% al 40% de incremento salarial -y ya muchos piden paritarias cada tres meses-, en la antesala de las negociaciones oficiales que se iniciarán masivamente el mes que viene.

"El 35% que habíamos pensado antes de esto -por el aumento de la divisa norteamericana- no creo que sirva; sí tenemos en claro que no vamos a aceptar que nos pongan un techo", advirtió por caso desde Mendoza la titular de la Asociación de Profesionales de la Salud, Isabel Del Pópolo, en una postal que se replica en otros puntos del país. En esa línea, el docente gremio fueguino SUTEF disparó exigencias del orden del 40%, tildadas de "sobredimensionadas e irracionales" por parte de la ministra de Educación de la exarista Fabiana Ríos, Sandra Molina.

En los últimos días, y con su sueño presidencial 2015 como telón de fondo, Scioli mantuvo encuentros con distintos mandatarios en los cuales avanzaron en la definición de pautas similares para encarar las negociaciones salariales en sus distritos.

De ese análisis fino participaron, entre otros, los también justicialistas Francisco Pérez (Mendoza), Luis Beder Herrera (La Rioja) y Juan Manuel Urtubey (Salta), y el renovador Maurice Closs (Misiones).

Otro dato clave se suma a esa estrategia: según trascendió de fuentes del interior, los mandatarios consensuaron con el jefe de Gabinete, Jorge Capitanich, patear el inicio de las paritarias para febrero, para concentrar la discusión en los días previos al inicio de clases, previsto para el 26 de febrero o el 5 de marzo, según el caso.

Con esa lógica, hasta ayer no se había concretado el llamado a paritarias a los cinco gremios docentes nacionales por parte del ministro de Educación, Alberto Sileoni, aunque hay conversaciones informales. Esa compulsa definirá el salario mínimo de los maestros a nivel país y servirá de referencia para las discusiones con los gremios locales.

Mientras tanto, algunos gobiernos -como el riojano- avanzan en la hipótesis de otorgar como aumento "un monto fijo", que vaya directo al sueldo de bolsillo y no sea remunerativo.

En este contexto, en la arena bonaerense se potenciaron en las últimas horas las estocadas gremiales, a partir de la escalada del dólar oficial que comenzó a derivar en remarcaciones en las góndolas.

Mientras redefinen su estrategia ante el nuevo escenario, los dirigentes ya dispararon convocatorias a huelgas.

En esa línea, la Asociación Sindical de Profesionales de la Salud de la Provincia de Buenos Aires (CICOP) oficializó ayer el llamado a dos huelgas de 48 horas: una arrancará el próximo jueves y la otra el miércoles 5 de febrero. Los dirigentes exigen una urgente convocatoria a paritarias, para acceder a un salario inicial de 10 mil pesos, retroactivo al 1 de enero.

"Las enormes consecuencias de las políticas inflacionarias del Gobierno nacional en el bolsillo de los trabajadores estatales sólo podrán ser enfrentadas en unidad de acción con el resto de los gremios estatales, por eso vamos el 5 de febrero a la reunión de la CTA, donde llevaremos nuestro plan de acción para consensuar medidas con los estatales, auxiliares, judiciales y docentes", advirtieron.

Por su parte, el titular de ATE y de la CTA opositora a nivel provincial, Oscar De Isasi, también anticipó nuevas protestas. "Hemos resuelto, desde ATE y desde la mesa provincial de la CTA, junto con judiciales, con el gremio médico CICOP, con agentes legislativos y con la Federación Nacional Docentes, un paro activo en la primera quincena del mes de febrero"; afirmó.

Fuente: Ámbito.com