AFIP

Abad le dice "no" a la disminución de la presión tributaria

Pese a que cada vez más sectores reclaman una reducción de la presión impositiva, el titular de la Administración Federal de Ingresos Públicos, Alberto Abad, negó ayer que se vayan a realizar reformas en este sentido.

"El aumento de competitividad debe venir por mejoras en la productividad, y no por bajas de impuestos", resaltó el funcionario.

Durante su exposición en la jornada organizada por el Foro Ecuménico Social, en la Universidad Católica Argentina, Abad aseguró que el camino es mejorar la administración del sistema vigente, en lugar de modificarlo. "La presión tributaria no es alta, es inferior al 37% del Producto Interno Bruto (PIB) de Brasil y al 50% de Suecia", comentó.

Consultado por diario El Cronista, el administrador federal calificó como "una verdadera pavada" las versiones que circulan sobre modificaciones extremas al sistema tributario, tal es el caso de la implementación del llamado impuesto único.

Según Abad, durante la crisis la Argentina se enfrentó al dilema de si debía cambiar su sistema impositivo o mantenerlo y perfeccionarlo. "Tomamos la decisión adecuada. No se pueden cambiar siempre las reglas de una democracia que es aún adolescente y cuyo pacto fiscal no está bien definido", explicó el funcionario.

Para reclamar menores impuestos, las empresas sostienen que la rentabilidad no es la misma que en años previos.

Consultado sobre la necesidad de otorgar incentivos para la producción, Abad dijo que desde la AFIP se otorgan diferentes beneficios, como la reducción de cuotas para monotributistas y autónomos, y la devolución anticipada del IVA.

"Todos los sectores nos piden bajar los impuestos. Si le hiciéramos caso a todos, la Argentina sería un paraíso fiscal", sostuvo Abad y remarcó que las modificaciones tributarias siempre implican que algunos sectores resulten perdedores.

"Los contribuyentes no son evasores, son ciudadanos. El 90% de las personas prefiere estar en la formalidad", dijo.

Aunque rechazó la puesta en práctica de una reforma tributaria integral, Abad comentó las direcciones sobre las cuales debería hacerse un cambio gradual.

En primer lugar, aseguró que el sistema impositivo debe reducir la desigualdad en la distribución del ingresos. "En la Argentina, el 20% más rico de la población concentra 53,1% de los ingresos, mientras que el 20% más pobre sólo se reparte el 3,8%", detalló.

Además, Abad es partidario de reducir la alícuota del impuesto al cheque para incrementar la bancarización de la economía, y con ello elevar los controles de la AFIP sobre las operaciones comerciales, reduciendo el uso del pago en efectivo. En otra oportunidad también se mostró a favor de tener alícuotas homogéneas para el cobro de IVA y de reducir las exenciones y las tasas diferencias que facilitan la evasión.

Fuente: El cronista.