ECONOMÍA

Consultoras estiman un crecimiento de hasta 6,5 por ciento del PBI

Cuando falta menos de un mes para que comience 2011, las consultoras les sacan punta a sus lápices para terminar de delinear los pronósticos para el año que viene. Las perspectivas de la cosecha, los altos precios internacionales, la inyección de dólares por parte de la Reserva Federal y la expansión de Brasil, son algunos de los factores que jugaron a favor de llevar los números un poco más para arriba. Así, las estimaciones más optimistas sostienen que el crecimiento será del 6,5%, mientras que las más pesimistas se ubican en el 3,2%. Es decir, nadie prevé recesión.

Si bien la expansión del PBI será menor a la de este año -que promete terminar en torno al 8%-, el buen contexto internacional promete traer dólares (debido a los altos precios de las materias primas que la Argentina exporta) que repercutirán de forma positiva en las distintas variables de la economía.

«El año que viene se combina un contexto internacional muy favorable que, si Europa no patea el tablero, va a ser bueno para los emergentes. Para la Argentina los términos del intercambio vuelven a los máximos de 2008. Proyectamos un crecimiento del 5,5%», explicó Ramiro Castiñeira, economista jefe de Econométrica.

En lo que va del año, el precio de la soja subió un 24% en Chicago. Ayer cerró en u$s 471,43 la tonelada. Además, para el Departamento de Agricultura de EE.UU. (USDA, por su sigla en inglés) la cosecha de 2011 será superior a la de este año. De soja esperan 52 millones de toneladas, pero también esperan incrementos en la producción de trigo, maíz y girasol. «Si las estimaciones se confirman, la Argentina en 2011 podría superar su récord de producción de 96 millones de toneladas de 2008», sostuvo Castiñeira.

Locomotora

Brasil también continuará con un alto ritmo de expansión, de alrededor del 4,5% en 2011. En los últimos meses, Luiz Inácio Lula da Silva retiró algunos planes de estímulo a la economía brasileña porque la inflación se estaba volviendo un problema cada vez más agobiante. Aún así, el gigante de la región seguirá siendo la locomotora que traccionará buena parte del crecimiento argentino.

El hecho que podría jugar en contra es la incertidumbre que se originaría por las elecciones presidenciales en 2011. «La política fiscal y de ingresos van a ser expansivas, por lo tanto la tasa de crecimiento va a estar determinada por lo que pase con la salida de capitales», indicó Marina Dal Poggetto, del Estudio Bein. Desde esta consultora estiman un crecimiento del 6,5%, como piso, y el dólar lo sitúan en $ 4,20. «Este número se explica por la hiperliquidez que hay en el mundo, que se traslada al alto precio de los commodities, en particular la soja», agregó.

Claro que el otro obstáculo, que viene afectando a la Argentina desde 2007, será la inflación. Las estimaciones la sitúan en torno al 25%. «Lo único que tira en contra del incremento de precios es la apreciación cambiaria. En los próximos meses esta ancla va a empezar a actuar», señaló Castiñeira.

(Ámbito Financiero)