El déficit financiero creció en agosto 150 por ciento a pesar de aporte récord del Banco Central

El déficit financiero del sector público aumentó 150,1% interanual en agosto al totalizar $ 1.877,2 millones, informó ayer la Secretaría de Hacienda.

Descontado el pago de intereses de deuda, las cuentas públicas mostraron un superávit de $ 868,7 millones, un 4,8% menor al de hace un año. Eso a pesar de que el Banco Central (BCRA) giró utilidades por una cifra récord para el octavo mes del año: $ 16.533,3 millones.

El BCRA y, en menor medida, la Administración Nacional de la Seguridad Social (ANSeS) volvieron así a financiar la creciente brecha entre los ingresos tributarios y el gasto público.

En agosto, los ingresos provenientes del fisco aumentaron 27,3% interanual y las contribuciones de la seguridad social, 30,4%. El gasto público, en tanto, trepó 49,3%. La diferencia entre “ingresos genuinos” y gastos es de “alrededor de 21 puntos porcentuales (...), la brecha más grande en lo que va del año”, según el Instituto Argentino de Análisis Fiscal (Iaraf ).

Esa diferencia se financió con $ 16.533,3 millones del BCRA, $ 1.712,9 millones de ANSeS y $ 143 millones de otros organismos, como PAMI. En total, los $ 18.400,2 millones contabilizados como Rentas de la propiedad significaron un incremento interanual de 290% para este concepto.

Los giros del BCRA prácticamente equivalen a todos los envíos del segundo semestre ($ 17.115 millones) y superan a los del primer trimestre ($ 12.361 millones). En ocho meses, el Central aportó $ 54.315,4 millones. “Este año están previstos giros por $ 70.000 millones y ya van más de 50.000 millones.

Eso es el financiamiento del desequilibrio fiscal”, dijo Maximiliano Castillo, economista de la consultora ACM. Entre ANSeS y BCRA giraron en el año $ 78.064,5 millones para financiar al Tesoro.

Del lado de las erogaciones, los gastos corrientes crecieron 46,2% interanual en agosto, fundamentalmente porque el pago de remuneraciones (37,5%) y jubilaciones (32,9%) compensa el incremento de las transferencias al sector privado, donde se computan los subsidios a los servicios públicos y planes sociales como la AUH. Este ítem creció 65% y aumenta 60,7% en el año. Los gastos de capital subieron 71,2%, aunque en el año el incremento es del 46,9%.

Así, entre enero y agosto los gastos crecieron un 46,5% y los ingresos, 43,2%. Sin contar las Rentas de la propiedad, los ingresos aumentaron 33,6%. Según Castillo, sin contar las transferencias del Central y de la ANSeS, el superávit primario acumulado en ocho meses, de $ 3.839 millones, se transformaría en un déficit de $ 73.161 millones.

Subsidios sin freno Gran parte del aumento del gasto se explica por la transferencia de recursos a las empresas públicas y privadas para evitar mayores aumentos a los consumidores en los precios de la energía y el transporte.

Los envíos a compañías públicas y privadas crecieron entre enero y septiembre 72% interanual y totalizaron 135.815,6 millones, según un informe de la Asociación Argentina de Presupuesto (ASAP).

Los subsidios a la energía aumentaron 86% en nueve meses. La Compañía Administradora del Mercado Mayorista Eléctrico (Cammesa) recibió un 98% más de recursos que hace un año ($ 56.160,5 millones) y Enarsa, 72% ($ 35.607 millones).

Los subsidios al transporte, en tanto, aumentaron 49%, a $ 29.136,2 millones.

Fuente: elcronista.com