El fondo Southern Cross se queda con una empresa naviera argentina

El fondo de inversión Southern Cross, pilotado por el empresario argentino Norberto Morita, concretó la compra de la compañía de transporte marítimo Ultrapetrol, en el que participará con el 78,37% de las acciones, representativas del 58,94% de los derechos a voto de la empresa. La firma naviera, que tiene un astillero en la ciudad santafesina de Punta Alvear y otro complejo en Ramallo, es propiedad de la familia argentina Menéndez Ross.

Los recursos para la compra de la productora de navíos provendrán de los fondos 3 y 4 de Southern Cross, a través de las sociedades filiales Sparrow Capital Investment y Sparrow CI Sub.

La operación está sujeta a una serie de condiciones. Entre ellas, se cuenta que los tenedores de un bono convertible de la compañía naviera, que vence en el 2017, entreguen su dispensa ( waiver ) para que se concrete la operación sin que se active el pago de la deuda. Si se satisfacen los requisitos, la inversión podría concretarse en diciembre de este año.

Ultrapetrol es una compañía de transporte naviero fundada en 1992 por un grupo empresario con más de cien años de actividad en los mercados de transporte de granos, aceites vegetales, minerales, petróleo crudo, productos de refinería y transporte de carga general y contenedorizada.

La compañía se especializa en la construcción de remolcadores de puerto y maniobra y para atraque de barcazas. Tiene fuerte actividad en las terminales portuarias de la zona de San Lorenzo, y en la hidrovía Paraná-Paraguay.

En el 2009, Ultrapetrol lanzó al mercado el remolcador de empuje Zonda 1, el más grande de su tipo en América del Sur, con bandera argentina.

La empresa es dueña en Punta Alvear, cerca de la ciudad de Rosario, de uno de los astilleros más modernos del mundo especializado en construcción de barcazas fluviales. Su capacidad industrial es de unas veinte embarcaciones tanque de doble casco por año.

Colombia

En paralelo, Southern Cross, en donde también participan Raúl Sotomayor, Ricardo Rodríguez y Horacio Reyser, también se quedó con el control del Puerto de Barranquilla.

La compañía de private equity adquirió el control de la terminal colombiana, a través de la compra de más del 50% de la Sociedad Portuaria Regional de Barranquilla, informó el diario El Mercurio.

Aunque el monto de la transacción no fue revelado, los recursos de esta inversión vendrán del Fondo IV de Southern Cross, que ya ha invertido en varias empresas regionales y que posee aportes comprometidos por u$s1.600 millones.

Barranquilla es uno de los principales puertos de Colombia en el mar Caribe y sus instalaciones se extienden por más de 100 hectáreas. “Invertiremos cerca de u$s100 millones adicionales en infraestructura y tecnología portuaria en los próximos años, para mejorar los niveles de servicio y productividad”, explicó Sotomayor.

La compañía reorienta su estrategia a nivel local

Cuando a mediados de año circulaban las versiones de que Southern Cross evaluaba desprenderse de Compañía General de Combustibles se descartaba que el fondo de Norberto Morita, ex número uno de Quilmes, abandonaría el país.

Sin embargo, esa venta aún no se concretó y, es más, ahora sumarán a Ultrapetrol entre sus activos en el país, con lo cual es un hecho que la empresa está repensando su estrategia local.

Lo que sí es cierto es que Southern Cross ya no tiene la exposición local que supo tener hasta no hace tanto tiempo.

De hecho, en los últimos años Southern Cross ha vendido varios de sus activos locales como la transportadora de caudales Juncadella, los laboratorios Northia y la compañía The Value Brand Company, dueña de marcas como Plusbelle, Plusbelle Evolution, Federal, Limol y Zorro.

Fuente: BAE