POLÍTICA ECONÓMICA

"Empezó a revertirse la caída de la producción de hidrocarburos"

El viceministro de Economía, Axel Kicillof, destacó la "batería de medidas que ha tomado el Gobierno nacional para atender el problema energético", y señaló que ya "empezó a revertirse la tendencia a la caída de la producción de hidrocarburos".

Kicillof presentó en la Biblioteca Nacional, junto al jefe de Gabinete de Ministros, Juan Manuel Abal Medina, el Informe Mosconi, elaborado por la intervención en YPF sobre la estrategia de depredación, desinversión y desabastecimiento de Repsol.

El funcionario, también director por el Estado en YPF, criticó asimismo a lo que él denominó como el "ejército de alcahuetes que aplaudía de pie a un capital privado que estaba destruyendo a la compañía, y con ella, con ser tan estratégica, al futuro de la Argentina".

Kicillof dijo que en los años 90 "se convirtió a YPF en un instrumento para la valorización financiera y para la extracción desmedida de un recurso escaso, en manos de unos especuladores que se dedicaron a cualquier negocio, menos aquellos que apuntaran al bienestar del pueblo argentino".

Según el viceministro, "el monopolio mediático busca ensuciar la medida de la toma de control estatal y nos acusan de `expropiadores chavistas`, que venimos a hacer un desparramo".

Lo cierto, dijo Kicillof, es que "el Informe Mosconi muestra los fundamentos claros y contundentes de que no había otra opción que hacer lo que se hizo".

El viceministro afirmó que Repsol tenía "oscuros intereses" y recordó que su titular, Antonio Brufau, contestó ante las demandas estatales de mayor inversión y producción que "para que hagamos lo que ustedes piden, nos van a tener que obligar".

Kicillof dijo que el Informe Mosconi es "histórico", porque "no difunde datos públicos, sino que revela datos que la gerencia de Repsol había escondido bajo siete llaves".

El director de YPF resaltó que "el punto fundamental del nuevo plan de la empresa es destinar sus ganancias a la inversión en el país, más allá de que se consigan recursos en el exterior, de capitales locales privados o del Presupuesto nacional".

"Con sólo destinar las ganancias de la empresa a la explotación, a la exploración de riesgo, con eso cambia la historia de los hidrocarburos en la Argentina", afirmó.

Tras reiterar que hubo "una liquidación y un vaciamiento de la empresa", Kicillof cuestionó a los "expertos en energía que se llenan la boca, pero nunca dijeron lo que hacía Repsol".

Según el funcionario, la empresa privatizada inclusive engañaba al Estado en su función reguladora.

El viceministro evaluó que "cada vez va a faltar más petróleo y más energía si seguimos creciendo como hasta ahora, a tasas inéditas en la historia argentina" y que por eso resultó imperioso retomar el control de la compañía para poder revertir la curva descendente que mostraba la producción de YPF en los últimos años.

Reseñó luego el Informe Mosconi, con los datos sobre el impacto de la desinversión en el retroceso de la exploración, de la producción y de los niveles de reservas de hidrocarburos.

"El saqueo de activos de YPF en el exterior fue inclusive más importante que en el país, y se endeudaron para pagar dividendos por montos que superaban la rentabilidad", agregó.

Kicillof destacó que la desinversión de Repsol afectó el superávit comercial, debido a la necesidad de mayores importaciones de energéticos; y al superávit fiscal, porque debían gastarse más recursos en esas compras.

El funcionario reiteró que la empresa privada buscaba alinear los precios internos de los combustibles con los internacionales, "cosa que proyectaban para 2014", lo que hubiera afectado los ingresos populares y la propia competitividad de la economía.

"En definitiva, lo que buscaban después del vaciamiento era la venta de la empresa en el mejor momento; estaban preparando la salida", añadió.

Kicillof destacó por último la necesidad de difundir las revelaciones contenidas en el Informe Mosconi, "para superar el cepo mediático que inventa y tergiversa".

Fuente: Télam