NEGOCIOS

Empresas invierten en compra de oficinas parte del dinero que no pueden girar al exterior

Las reglas de la compleja economía argentina comenzaron a producir algunas particularidades en el mercado inmobiliario.

La construcción de oficinas siempre fue uno de los puntos centrales en el negocio del real estate, pero ahora tomó una importancia bastante especial.

Como consecuencia de la imposibilidad que tienen hoy para girar divisas al exterior, las empresas decidieron que una buena forma de canalizar ese dinero es la compra de oficinas.

Esta determinación les permite, en muchos casos, dejar de ser inquilinos para ser propietarios, o simplemente mejorar sus instalaciones.

“La Argentina se enfrenta una vez más a un proceso inflacionario que está minando la confianza sobre el peso argentino. En este contexto, las empresas deben asumir la dificultad de girar sus dividendos al extranjero, lo que sumado a la restricción para la compra de divisas, ha generado la acumulación de los mismos en moneda nacional”, apunta un informe elaborado por la consultora inmobiliaria Cushman & Wakefield.

“Esto, junto con la falta de alternativas de inversión, ha disparado la compra de activos inmobiliarios como mecanismo de protección contra la inflación, ayudando a sostener el precio de los bienes raíces. Así, algunas empresas continúan subordinando sus decisiones inmobiliarias a la utilización de la liquidez acumulada, adquiriendo activos inmobiliarios a pesar de los altos valores de mercado actuales y la baja rentabilidad”, explica el trabajo.

El último gran ejemplo en este sentido lo que ocurrió con la torre de 33 pisos que construye Consultatio, la empresa que comanda Eduardo Costantini, en la zona de Catalinas.

El BBVA Francés compró nada menos que 23 pisos de ese edificio, para lo que terminará desembolsando u$s 1.200 millones en una obra que estará completada a fines de 2016.

El trabajo de Cushman & Wakefield muestra también el interés por parte de los desarrolladores en construir oficinas.

Sostiene que en Capital Federal y Gran Buenos Aires se irán incorporando al mercado a lo largo de este año 50.700 metros cuadrados (m2). El 88% de esta superficie está situado en el denominado “corredor norte”, que abarca avenida Libertador y el Norte del Gran Buenos Aires.

La consultora inmobiliaria indicó que, en este sentido, se espera que en el tercer trimestre de este año finalice la construcción de los edificios Thames Office Park, Al Río y Altman Eco Office, lo que podría reducir el índice de vacancia (la disponibilidad de espacios), ya que la mayor parte de la superficie se encuentra alquilada.

Respecto del mercado de alquiler de oficinas, si bien hay sectores que muestran mayor dinamismo, el informe detalla que “la demanda se volvió selectiva, al tiempo que los precios de los alquileres comienzan a ceder de manera moderada, mientras que el índice de vacancia muestra un leve crecimiento, y llega al 7,5 por ciento”.

En cuanto a los precios, el mercado de oficinas de buen nivel, denominado clase A, está concentrado en la zona de Catalinas-Retiro y Puerto Madero y reúne 52,8% de la superficie rentable total. El alquiler mensual ronda los u$s 28,8 por metro cuadrado.

En tanto, el mercado de oficinas clase B muestra un precio de alquiler promedio de u$s 21,6 el metro cuadrado.

Fuente: Cronista.com