Exigen a CGT desactivar paro a cambio de Ganancias y bonos

El Gobierno le ofrecerá a la CGT eximir el aguinaldo de fin de año del pago del Impuesto a las Ganancias y habilitar a los gremios la negociación de compensaciones por el desfasaje entre sus paritarias y la inflación acumulada a cambio de desactivar la amenaza de un paro nacional. Las concesiones y la eventual contraprestación gremial se pondrán en juego mañana en la reunión que mantendrá la cúpula de la central obrera con los ministro de Hacienda, Alfonso Prat Gay; de Trabajo, Jorge Triaca, y de Producción, Francisco Cabrera, junto a Mario Quintana, coordinador interministerial.

La hoja de ruta fue definida por los funcionarios y apuntará a poner freno a otros reclamos, como una reapertura generalizada de las paritarias, el pago de un bono salarial por decreto o el adelantamiento de posibles cambios en las escalas de Ganancias, entre otros que forman parte del pliego de la CGT. En el equipo económico le confirmaron a este diario que los ejes serán el alivio en el medio aguinaldo, que tendrá especial impacto en gremios con sueldos medianos y altos, como los casos del transporte y los de la energía, así como la facilitación de bonos compensadores en algunos sectores de la actividad privada que negociaron sus paritarias en los primeros meses del año y que sufrieron más la pérdida de poder adquisitivo, como los metalúrgicos de la UOM.

Será una prueba decisiva tanto para el Gobierno, que aspira a mantener un acuerdo táctico con la cúpula de la central obrera mayoritaria, como para el triunvirato de líderes de la CGT, recientemente electo y que deberá sostener un eventual entendimiento con el Ejecutivo frente a dirigentes que daban por sentado el llamado a una huelga para el mes que viene.

La protesta, como había anticipado este diario, se encontraba en duda a partir de la decisión de sindicatos estratégicos del transporte y la industria de darle tiempo a Mauricio Macri para hacer concesiones. De ahí que el Comité Central Confederal que se reunió el viernes pasado resolviera lanzar un paro pero no ponerle fecha, algo que en la jerga gremial es un gesto inequívoco de voluntad negociadora.

En la actual encarnación de la CGT existe una voluntad mayoritaria de no confrontar con el Gobierno. Lo resolvieron los gremios de la Confederación de Trabajadores del Transporte (CATT), dependientes en gran medida de los subsidios a la actividad, y por otro lado los de la industria, que mantuvieron días atrás encuentros con funcionarios en los que se llevaron el compromiso de que no habrá una apertura indiscriminada de las importaciones.

Resta saber si las concesiones que ofrecerán los ministros serán suficientes. Uno de los negociadores de la CGT planteó la duda principal que atraviesa a los dirigentes: comparó la gestión con la historia en la Odisea de Penélope, que destejía de noche lo que tejía de día, como metáfora de los avances y retrocesos en los compromisos asumidos por los funcionarios.

Ayer la cúpula directiva de la central obrera mantuvo un encuentro en la sede de los estatales de UPCN. Con excepción de Carlos Acuña estuvieron los otros dos miembros del triunvirato, Héctor Daer y Juan Carlos Schmid, junto al dueño de casa, Andrés Rodríguez, el gastronómico Luis Barrionuevo y Mario Caligari, representante de los colectiveros de UTA, entre otros, para analizar el planteo que se llevará mañana al encuentro en la sede de la cartera laboral.

Fuente: ámbito.com