FIEL presentó plan de reforma en impuestos

La Fundación FIEL presentó un plan para reformar el sistema tributario argentino. En un documento titulado "El sistema tributario argentino. Análisis y evaluación de propuestas para reformarlo" -elaborado por Daniel Artana, Isidro Guardarucci, Pablo Lavigne, Jorge Puig y Nuria Susmel-, se plantearon una serie de propuestas que apuntan a resolver algunos de los desafíos que enfrenta la economía. Entre ellos se menciona la baja tasa de inversión y la elevada evasión. Los que siguen son algunos de los principales puntos que incluye el trabajo de la consultora:

•Establecer un IVA a tasa uniforme del 19%, que permitiría obtener una recaudación similar si se eliminan los tratamientos que no tienen efecto sobre la distribución del ingreso, y que generan una pérdida de ingresos de casi un 1% del PBI.

•Derogar impuestos -como el de ventas de automotores o de productos electrónicos-, ya que probablemente aportarían recursos adicionales, de modo que la mayor recaudación no sería inferior al 0,2 por ciento del PBI. También se propone eliminar impuestos que perderían sentido si se acabara con el cepo cambiario.

•Eliminar las diferencias que permiten reducciones por tamaño de empresa y por región en las contribuciones y aportes a la seguridad social y gravarlas con un monto uniforme del 12%. Cada punto de reducción tendría un costo fiscal del 0,2% del PBI. Una rebaja tendría impacto positivo sobre el empleo formal y los salarios netos y podría ser mayor si se reduce la rigidez de normas laborales que introducen cambios innecesarios que no benefician a los trabajadores.

•Ajustar las escalas por inflación en el Impuesto a las Ganancias de personas físicas y a los bienes personales. En el primero de los casos, los contribuyentes deben pagar tasas medias elevadas dado que la inflación comprimió la escala -tendría un costo fiscal del 0,5% del PBI-. Además, la reforma de 2013 profundizó el sesgo a favor de financiar inversiones con deuda y gravó ganancias de capital que estaban impuestas indirectamente, por lo que convendría derogarla. En tanto, para el segundo se debería volver a un esquema mínimo no imponible tradicional.

•Tomar medidas que reduzcan impuestos en vez de ofrecer incentivos impositivos -que se consideran poco eficaces-, en particular sobre las inversiones financiadas con fondos propios. Esto debería ser acompañado por la eliminación de tratamientos especiales que existen en algunos regímenes sectoriales, aunque el potencial de ingresos por eliminar estos beneficios es limitado.

•Una reducción en las retenciones a las importaciones que elimina las actuales (excepto soja y derivados, que se gravarían al 15%) implica sólo un costo fiscal del 0,5% del PBI. Además, si no se modifica el reparto de recursos entre la Nación y las provincias, el costo aumentaría al 0,9% del producto.

•Reducir a la mitad el límite para ser considerado responsable inscripto en el IVA. Esto podría hacerse manteniéndolo sin ajuste por algunos años. Respecto de los impuestos "subnacionales", se podría reemplazar el Impuesto a los Ingresos Brutos por un IVA provincial o un impuesto a las ventas minoristas para compensar a las empresas "perdedoras" por el cambio de base imponible".

•Aumentar gradualmente la proporción que puede descontarse como pago a cuenta del Impuesto a las Ganancias del Impuesto a las Transacciones Financieras. Sobre éste último se advierte que es difícil eliminar el tributo por su elevada tasa de recaudación.

Fuente: ámbito.com