Fuerte preocupación en la OMC y el FMI por la guerra comercial que inició EE.UU.

Una nueva advertencia respecto a los alcances en la economía global si se profundiza la escalada proteccionista hizo la Organización Mundial de Comercio (OMC), a continuación de una dura declaración del Fondo Monetario Internacional (FMI) sobre el mismo tema.

Esta vez, el portavoz fue el director general del organismo, Roberto Azevedo, quién aseveró al diario económico Handelsblatt que "si se agudiza la guerra comercial, existe el riesgo de una desaceleración económica a nivel mundial y ya estamos viendo señales de que este proceso ya ha empezado".

En tal sentido, el ejecutivo instó a las autoridades a persistir en el diálogo para evitar las restricciones al libre flujo de bienes y servicios. "Debemos detener esta escalada de tensiones. Una política de ojo por ojo no ayudará a nadie" agregó Azevedo.

Ello, luego que Estados Unidos (EE.UU.) iniciara una campaña para acotar el déficit comercial que mantiene con naciones de la Unión Europea (UE), México y Canadá, tarea para la cual puso en marcha nuevos aranceles a la importación de acero y aluminio proveniente de tales países, los que respondieron con medidas tributarias. China también se ha visto tocada por el nuevo perfil que adoptó la Casa Blanca en una franca disputa por la protección de la propiedad intelectual.

Por su parte, la directora gerente del Fondo Monetario Internacional (FMI), Christine Lagarde, dijo ayer que los riesgos para la economía global están aumentando a medida que las principales naciones industrializadas agudizan las amenazas de una guerra comercial.

"Las nubes en el horizonte que señalamos hace seis meses se oscurecen cada día más, y lo iba a decir el fin de semana", dijo la funcionaria en Berlín.

Los comentarios siguen la caótica reunión de dos días del

Grupo de los Siete (G-7) en la que el presidente Donald Trump sorprendió a otros líderes al abandonar el encuentro de forma anticipada y acusar al anfitrión, Justin Trudeau, de deshonesto y débil, a través de Twitter.

Otros países del G-7 cabildearon infructuosamente en la cumbre para que Estados Unidos revirtiera los nuevos aranceles a las importaciones al acero y al aluminio importados.

Trump redobló la apuesta y desafió a los líderes mundiales a eliminar todas las barreras comerciales, aranceles y subsidios y amenazó con dejar de comerciar con ellos por completo.

Alemania y Francia, que también son parte del G-7, criticaron a Trump por retirar su apoyo, y se les unió el Reino Unido al reiterar su respaldo al comunicado conjunto.

Lagarde, quien asistió a la cumbre en Quebec, no mencionó a Trump por su nombre. No obstante, es claro que sus advertencias sobre los riesgos de proteccionismo han aumentado en las últimas semanas a medida que Estados Unidos impone más aranceles y amenaza con más, incluso contra China.

Fuente: Diario BAE