ECONOMÍA

"La inversión en la economía real tiene que estar en el centro del sistema económico"

El ministro de Economía, Amado Boudou, dijo que la privatización del régimen de reparto respondió a una "concepción económica que ponía al sistema financiero por sobre el trabajo, generando desigualdad y pobreza". El Gobierno implementó un sistema "colectivo y con un sentido redistributivo", afirmó. "La privatización del sistema de seguridad social, impulsada por múltiples foros de pensamiento que lo postulaban como la única salida, quebró los principios rectores de la seguridad social que, por definición, debe ser colectiva y con un sentido redistributivo", enfatizó el ministro, al cerrar el seminario internacional de seguridad social junto al titular de la Anses, Diego Bossio, y el embajador argentino ante la ONU, Jorge Argüello.

“No podía tolerarse un sistema que, además de ser ineficiente, estaba generando desigualdad y pobreza”, ya que se regía con la concepción de “transformar el seguro colectivo en uno individualista”, agregó.

El titular del Palacio de Hacienda criticó, entonces, “la concepción económica que ponía al sistema financiero por sobre el trabajo”.

Dijo que se trató de una “cuestión ideológica, que buscó desplazar la política como herramienta de transformación y dejó en el centro de la escena a las corporaciones”.

Remarcó que en los ´90 “se buscó separar las necesidades de las personas de las de las instituciones” y señaló que “los grupos concentrados de información mediática", al igual que el FMI y las calificadoras de riesgo, postulan un “sistema orientado a que el poder político sea gerenciador del poder económico”.

“La privatización del régimen de seguridad social, que generaba seguros individuales para aquellos que podían pagarlo, era una pieza clave de esa concepción que despreciaba a la democracia y la utilizaba sólo como una fachada”, señaló el titular del Palacio de Hacienda.

En ese sentido, explicó que “el Gobierno se propuso poner a la política en el centro de la escena y, por lo tanto, a los ciudadanos en la toma de decisiones”.

Indicó que esta lógica de acumulación de capital fue “impulsada por las calificadoras de riesgo” y “generó un flujo de fondos hacia muy pocas manos; más concentración y más exclusión de los mayores”.

“En una sociedad en la que la toma de decisiones está condicionada por el poder mediático y económico, necesariamente va a haber exclusión”, abundó.

“El régimen de seguridad social que implementó este Gobierno es una herramienta de distribución del ingreso”, dijo y aseguró que “no es posible que un interés particular prime por sobre el conjunto de la sociedad”.

Señaló que la reforma del sistema de reparto se realizó con la “convicción de que en el centro del sistema económico tiene que estar la inversión en la economía real”.

Afirmó que el sistema de seguridad social debe ser de “reparto asistido, porque la masa de recursos debe ser generada por el trabajo del conjunto de la sociedad”.

Por eso, dijo, “es necesario mantener niveles de consumo, para sostener un mercado interno fuerte que permita una buena redistribución del ingreso”. En contra de las calificadoras de riesgo, afirmó que “las decisiones de los consumidores son la mejor señal de asignación de recursos”.

Al referirse al sistema de movilidad jubilatoria, Boudou subrayó que “no sólo permitió mejorar los ingresos de los jubilados, sino también la sustentabilidad del sistema en el tiempo, porque son los recursos los que determinan el aumento”.

"Las transformaciones realizadas nos obligan a ser más audaces y buscar nuevos mecanismos para mejorar la calidad de vida”, finalzó.

Durante la actividad, Bossio sostuvo que “la seguridad social es un paradigma que está vigente en todo el mundo” y remarcó que la Anses "brinda una experiencia única, que es la protección social a los ciudadanos en todas las etapas de la vida, a través de la Asignación por Embarazo para Protección Social, Asignación Universal por Hijo, Asignaciones Familiares y de la Jubilación”.

Además indicó que, “desde el 2003, el Gobierno ve a la seguridad social como una verdadera herramienta de inclusión social”.

Por su parte, el embajador argentino ante la ONU destacó la "necesidad de generar una nueva Convención de Derechos Humanos para los adultos mayores”.

Afirmó que “hay discriminación, maltrato y abuso” hacia ellos y por eso se refirió a la importancia de garantizar un “convención de los invisibles”.

Explicó que “la Convención de Derechos Humanos hizo el recorrido inverso al que se utiliza en las catástrofes, ya que primero se universalizaron los derechos del hombre, luego los de las mujeres y chicos, y recién ahora planteamos la necesidad de incluir a los mayores”.

En ese sentido, precisó que, “en 2050, por primera vez en la historia, van a ser más los mayores de 60 años que los menores de 40”.

Argüello preside el Grupo de Trabajo que lidera Argentina en la ONU y que busca, en un principio, definir cuál es el estado de situación actual de los mayores, para avanzar hacia una convención que los incluya.

El seminario internacional "Protección social, inclusión y equidad" fue organizado por el Observatorio de la Seguridad Social de la Anses y se desarrolló entre ayer y hoy en el Hotel Panamericano.

El encuentro consistió en dos jornadas de trabajo entre especialistas que llegaron desde España, Dinamarca, Brasil, Chile, Panamá, Bolivia, Ecuador, México y El Salvador para compartir sus experiencias con sus pares de nuestro país.

Fuente: Ministerio de economía