Mejora el crédito a pymes, pero advierten que la suba de tasas podría afectarlo

El crédito a las pequeñas y medianas empresas registró a lo largo del año pasado un alto dinamismo, una tendencia que se mantuvo en enero, pero los industriales advierten que la nueva política de suba de tasas de interés que lleva a cabo el Banco Central, en el marco de las negociaciones con el FMI, puede tener un impacto negativo.

De acuerdo con un informe elaborado por la Asociación de Industriales Metalúrgicos de la República Argentina (ADIMRA) tanto el financiamiento en el mercado de capitales como el bancario siguieron en el inicio del año marcando la tendencia positiva con la que cerraron el 2021.

En diciembre el crédito en pesos al sector privado subió 1,2% en términos reales con respecto a noviembre y registró el nivel más alto de 2021 superando en 2% el stock promedio de 2019. En el caso de las pymes, el resultado fue mejor: creció 5,2% en términos reales en relación a noviembre, ubicándose en el nivel más alto de los últimos 40 meses a precios constantes. Con ello registró 21 meses consecutivos de crecimiento real interanual.

Pero el nuevo escenario de “nominalidad” que el Banco Central tratará de sostener a lo largo del 2022, cuando se cierre el acuerdo con el FMI, puede complicar el acceso al financiamiento de las empresas.

En su último reporte de actividad industrial, el Centro de Estudios de la Unión Industrial Argentina (CEU) advierte que “la reciente suba de tasas de interés en enero por parte del BCRA podría complicar la situación ya delicada del financiamiento” y dice que “se espera para los próximos meses un encarecimiento del crédito”.

Para la UIA, durante el 2021, el stock real de préstamos al sector privado, incluyendo pesos y dólares, y todas las líneas (desde comerciales hasta tarjetas de crédito), se contrajo un -10,4%. Los préstamos en dólares registraron la mayor contracción con un 32,1% interanual, mientras que los préstamos en pesos en términos reales tuvieron una caída interanual de 4,3%.

“A pesar de esta caída, los préstamos en pesos lograron revertir la tendencia a la baja durante el segundo semestre del año, registrando subas mensuales”, plantea la central fabril. En ese sentido, subraya que la tasa de adelantos en cuenta corriente promedió el año en 35,6%, y se mantuvo por debajo de la inflación interanual, mientras que respecto del promedio de 2020, la tasa se incrementó 609 puntos básicos.

En tanto ADIMRA, una entidad que pertenece a la UIA, sostiene que “en el mes de enero, el financiamiento obtenido por las pymes en el mercado de capitales ascendió a $22.653 millones, un monto 73% superior al observado el mismo mes del año anterior y 2% inferior al observado en diciembre. El 46% del financiamiento total se consiguió mediante la colocación de instrumentos con oferta pública.

El reporte indica que sobre el total de $22.653 millones obtenidos por las pymes en el mercado de capitales, el 71% corresponde a descuento de cheques de pago diferido.

En cambio, en el sistema bancario las empresas consiguieron $39.463 millones en adelantos en cuenta corriente a una tasa del 44,3%, con un crecimiento del 29% en términos reales respecto de enero del 2021. En el segmento de préstamos a sola forma, el financiamiento a las pymes fue por $35.201 millones con una mejora de 22% interanual real, a una tasa del 35,4% y mientras que en descuentos de cheques se destinaron $79.908 millones, con un avance interanual del 61% a una tasa del 32.1%.

En tanto, el programa económico que firmará el gobierno con el FMI va a obligar al Tesoro nacional a financiarse en pesos para cumplir con las metas de fuerte reducción de la emisión monetaria. Eso puede “secar la plaza” de moneda nacional, señalan analistas del sector privado. Darío Epstein, de Reacher for Trade, advierte sobre lo que se denomina un fenómeno “crowding out”. “El sector público va a desplazar al sector privado. La lógica sería que suba la tasa de interés”, explicó.

Por Carlos Lamiral

Fuente: Ámbito