ECONOMÍA

Ministerio de Trabajo confía en llegar a un acuerdo con el Consejo del Salario

“Creo que vamos a tener un número que responda a lo consensos”, dijo el ministro, quien destacó la actividad del Consejo del Salario.

Mientras se espera la fecha de concreción de la reunión del Consejo del Salario, el ministro de Trabajo, Carlos Tomada, confió ayer en que “finalmente habrá consenso” entre los representantes de los sindicatos y de los empresarios para fijar un nuevo piso salarial. “Creo que vamos a tener un número que responda a los consensos”, afirmó Tomada, aunque recordó que “el trabajo a nivel del Consejo del Salario siempre ha sido duro, intenso, como tiene que ser cuando se discuten estas cosas”.

El funcionario precisó, además, que “el salario mínimo se está discutiendo una vez finalizados los convenios colectivos y esto quiere decir que cuando lo estamos discutiendo estamos fijando un valor que también da cuenta de qué es lo que pasó en las paritarias, porque se aplica a aquellos trabajadores que no han sido alcanzados por las negociaciones colectivas”. Consultado sobre el pedido salarial de la CGT y la posición de los empresarios, Tomada respondió que como en otras oportunidades las partes “hacen algunos escarceos previos”. Y agregó que “en este caso han planteado los números ambas partes públicamente, eso le pone un poco más de condimento, pero vamos a encontrar aquel nivel del salario mínimo, porque no es sólo un problema de porcentajes sino de un número que los empresarios consideren que pueden sostener, pensando en una jornada de un trabajador de ocho horas que no está comprendido en convenios colectivos”.

El titular de la cartera de Trabajo puso de relieve que “afortunadamente las negociaciones colectivas, como el Consejo del Salario Mínimo, se han convertido en activos de la sociedad toda, son instituciones que funcionan no espasmódicamente o producto de la impronta de algún funcionario”. Consultado sobre si existe relación entre la suba de las jubilaciones y el haber mínimo, Tomada respondió que “no, son índices absolutamente diferentes”.

Fuente: Tiempo Argentino