INTERNACIONAL

Parlamento de Chipre aprobó recortes para acceder a rescate

El Parlamento chipriota aprobó el paquete de ajuste acordado con la troika a cambio del rescate financiero, en una votación ajustada y tras un debate marcado por el rechazo frontal de la oposición y la aceptación a regañadientes por parte de los partidos que apoyan al Gobierno.

El paquete de medidas contó con los 29 votos exactos que suman la mayoría absoluta, y el voto negativo de 27 diputados. Con ello ya nada se interpone en el camino de un rescate, que contempla por primera vez una quita obligatoria a los depósitos de más de 100.000 euros para sanear sus dos mayores bancos.

La Unión Europea y el Fondo Monetario Internacional (FMI) ya han dado luz verde a la ayuda de 10.000 millones de euros para el programa de ayuda. La isla tendrá que aportar cerca de 13.000 millones de euros al programa de ahorro.

El presidente, Nikos Anastasiadis, apeló durante una visita a una base militar al "sentido de la responsabilidad" de los políticos y pidió el apoyo a un plan que, subrayó, "permitirá a nuestro país respirar y nos da la oportunidad de superar los problemas de la crisis que afrontamos".

Su socio de coalición, el líder del centrista DIKO, Marios Karoyian, fue más explícito, al calificar de "injusta, irracional, dura y violenta" la decisión del Eurogrupo de imponer un plan de ajuste. Karoyian expresó lo que todos piensan en Chipre, incluido el propio Anastasiadis, que aún ayer volvió a repetir que su país se ha convertido en "conejillo de Indias" de la eurozona.

Karoyian, no obstante, apoyó el programa con el argumento de que no hay otra opción, una postura que no compartió nadie en la oposición, y el que menos el partido comunista AKEL, al frente del último Gobierno, que abogó por plantear una salida del euro.

La aplicación de este paquete de ajustes es requisito imprescindible para obtener el rescate de 10.000 millones de euros de la troika formada por la Comisión Europea, el Banco Central Europeo y el Fondo Monetario Internacional y que suponen el 60 % del producto interior bruto (PIB) de este país mediterráneo.

Sin embargo, la propia Chipre tendrá que aportar 13.000 millones de euros al rescate en medidas de ahorro, subida de impuestos y venta de propiedades públicas, de manera que finalmente el total del programa ascenderá a 23.000 millones de euros. De los 10.000 millones de euros, 2.500 millones de euros serán empleados para la recapitalización de la banca, 4.500 millones para cubrir la amortización de la deuda y 3.400 millones para atender las necesidades financieras.

Las medidas que componen el paquete de ajuste deberán haberse aplicado en un plazo de cinco años, en lugar de los tres previstos en el preacuerdo de noviembre pasado, lo que da un respiro al Gobierno para evitar un impacto demasiado drástico.

El plazo de amortización será de 22 años, a un interés de entre el 2,5% y el 2,7%. De acuerdo al plan, Chipre deberá alcanzar un superávit primario del 3% (excluido el pago de los intereses de la deuda) en 2017 y del 4% en 2018.

Entre las medidas fiscales, figura una subida del impuesto sobre el valor añadido del 17% al 18% en 2013 y al 19% en 2014, y del IVA reducido del 8% al 9%, a partir del próximo año. Además, se eleva del 10 % al 12% el impuesto de sociedades, y al 30% el sobre la renta de las personas físicas.

A los empleados públicos se les aplicará este año un recorte salarial progresivo, que comienza con un 0,8% para los salarios inferiores a los 1.000 y alcanza el 14,3% para los superiores a los 4.000 euros; en 2014, la reducción será de un 3% independientemente de los ingresos. Además, se eliminarán al menos 4.500 empleos públicos.

Del aumento de los impuestos sobre los bienes inmuebles, el Estado espera recaudar 75 millones de euros, y del programa de privatizaciones, 1.000 millones hasta 2016 y otros 400 millones hasta 2018.

Uno de los grandes apartados del memorando es la reestructuración del sector bancario, básicamente de los dos bancos principales, el Banco de Chipre y el Banco Popular (ya en proceso de liquidación), a cuyos depósitos superiores a los 100.000 euros se están aplicando fuertes quitas, que en el primero podrán alcanzar el 60% de su valor, y en el segundo hasta el 80%.

Con esta reestructuración, el sector bancario pasará de representar el 550% del producto interior bruto del país a un 350%. El objetivo es seguir reduciendo este porcentaje a través del saneamiento de los bancos cooperativos.

Finalmente, el Banco Central de Chipre elevará hasta finales de año el ratio mínimo del capital de calidad de los bancos (Core Tier 1) del 8% al 9%. Mientras se celebraba el debate, en las afueras del parlamento unas 400 personas se manifestaban contra el acuerdo con pancartas en la que se podían leer frases como "Chipre no será un protectorado de la troika", o "No vamos a transformarnos en los esclavos del siglo XXII.

Fuente: Ambito.com