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Un informe sostiene que distribuyen a los pobres mejor los privados que el Estado
El Estado en Argentina distribuye ingresos entre las familias más pobres de manera menos eficiente en que lo hacen las fuentes de origen privado, asegura un informe de la consultora Sociedad de Estudios Laborales (SEL).
La hipótesis del trabajo de SEL se basa en que entre el 30 por ciento de la población de menos ingresos, el Estado aporta el 13 por ciento de los ingresos y las fuentes privadas el 15 por ciento.
En cambio, en el 30 por ciento de la población de más altos recursos, el estado aporta el 40 por ciento y las fuentes privadas el 37 por ciento.
La explicación que da la consultora dirigida por Ernesto Kritz es que los salarios que abona el sector público parten de un promedio de 4.000 pesos, mientras que los privados de 3.000 pesos.
El trabajo toma como fuentes de ingresos públicas a los sueldos de los empleados, a las jubilaciones y los planes sociales, mientras que para el sector privado suma a los salarios de empresas, los sueldos no registrados y el cuentapropismo.
"Las transferencias monetarias tienen mucha importancia para los hogares más pobres, y en su mayor parte llegan a estos; pero, como se observa, pesan muy poco en el total de los ingresos familiares de fuentes públicas", señala la SEL. En cambio, asegura que los salarios por empleo público, que tienen un peso elevado, están distribuidos "muy desigualmente".
Según detalla el estudio en los tres deciles inferiores de la pirámide social los hogares reciben sólo el 7 por ciento de los salarios estatales en tanto que el decil más alto se concentra un tercio del total de esta fuente principal".
El estudio indica que el salario privado registrado aporta el 33 por ciento de los ingresos de los hogares, el cuentapropismo el 19 y el empleo no registrado el 11 por ciento.
En tanto, el salario aporta el 17 por ciento de los ingresos de las familias, jubilaciones y pensiones el 13, otras fuentes estatales el 5, y la asignación universal por hijo solo el 2 por ciento de los ingresos de la población.