INTERNACIONAL

Uruguay cerró 2012 con cifra récord de exportaciones

Sin cepo cambiario ni una Secretaria de Comercio Interior en busca de equilibrar balanzas comerciales, Uruguay cerró 2012 con un cifra récord de exportaciones por u$s 14.200 millones. La cuenta se compone de ventas de productos tradicionales, de u$s 9.000 millones, exportaciones, desde las zonas francas, que superan los u$s 1.500 millones, y ventas de servicios, de u$s 3.700 millones.

El sector de mayor crecimiento fue el de alimentos, como la soja, la carne, el trigo, los productos lácteos y varias ramas de la industria química, especialmente los productos para la agricultura.

No obstante, a los exportadores les preocupa la pérdida de competitividad, sobre todo con la región, a donde se dirigen los productos de mayor valor agregado.

“Nos agrada mucho el récord de las exportaciones, que se explica por el crecimiento de la agroindustria. En el resto de los productos, hay luces y sombras”, dijo Álvaro Queijo, presidente de la Unión de Exportadores del Uruguay (UEU).

El presidente de la UEU aguarda que el Banco Central “no haga nada que afecte aún más la competitividad”, en referencia a la decisión que debe tomar la autoridad monetaria respecto a la tasa de interés de referencia y ante la preocupación de una suba de la misma.

Por su parte, el presidente, José Mujica, reconoció que “existen dificultades en la región con las ventas con valor agregado, a causa de la fluctuación del dólar. Agregó que hay algunas actividades, particularmente aquellas que requieren de mucha tecnología, “que no están expuestas a problemas de competitividad”, aunque reconoció que en las exportaciones de valor agregado “hay algunos problemas”.

A conversar

Según Álvaro Queijo, debe existir diálogo entre las partes para solucionar los problemas que se presentan a nivel de la competitividad.

“Esperamos que se revierta un poco la tendencia de pérdida de competitividad. El sector solicita un reconocimiento y hay que tratar de defender las fuentes de trabajo y el valor agregado de las exportaciones.Somos un país chico que necesita ser competitivo para exportar y que el mercado interno se potencie. El sector industrial, especialmente la industria del plástico y la vestimenta, son las áreas que atraviesan más problemas Hay que ver todos los sectores y los de valor agregado son los que están sufriendo”, comentó el representante de los exportadores.

Durante 2012, llegaron niveles de inversión muy altos al Uruguay. En este rubro, también, se batió un nuevo récord, con guarismos sin precedentes y una participación muy alta de la inversión extranjera directa.

Para explicar este fenómeno, Roberto Villamil, director Ejecutivo de Uruguay XXI, señaló que “en función de lo que hablamos con los empresarios que vienen, es que no está claro el panorama a corto y mediano plazo en Europa y los Estados Unidos. Por eso, los inversores optan por los mercados emergentes que van a seguir creciendo y generando oportunidades de negocios con rentabilidad. Esta situación genera un flujo creciente de capitales, que vienen desde las zonas más afectadas por la crisis, especialmente Europa y los Estados Unidos, pero, también, está llegando mucho capital desde Asia, sobre todo en proyectos vinculados a la industria manufacturera, servicios, telecomunicaciones y generación de energía”. Para 2013, Uruguay XXI impulsará acciones de promoción de exportaciones a mercados de América latina, sudeste asiático, Medio Oriente, y África. Tanto Gobierno como privados, trabajan en un plan tendiente a posicionar al Uruguay como un polo logístico. Sin embargo, la crisis que afecta a la región dificulta sus planes. Además de la caída de Pluna, siguen postergadas las mejoras de las carreteras, los principales puertos están casi saturados y revitalizar los trenes es aún un sueño lejano.

Hace un año y para defender la necesidad de un impuesto a la tierra, el presidente, José Mujica, advertía que se avecinaba un “apagón logístico”. Ante el aumento del tráfico y las cargas de los camiones con granos, madera y carne, Mujica señalaba que “el hecho sustantivo es que los 8.470 kilómetros de carretera de este país se arrugan”. El reciente impulso a la construcción de un puerto de aguas profundas en Rocha y los anuncios reiterados para recuperar el ferrocarril muestran hasta qué punto el tema logístico desvela al presidente uruguayo.

Fuente: Cronista.com