A diferencia de 2011, la oposición definirá este año a sus candidatos en las primarias

Hace dos años, el verano político despuntaba con las críticas de la oposición a la ley de Primarias Abiertas, Simultáneas y Obligatorias (PASO) que el Congreso había sancionado un tiempo antes a instancias de las mayorías kirchneristas. Una elección nacional después, el panorama es completamente distinto. De cara a los comicios de octubre, la mayoría de los partidos opositores se prepara este año para aprovechar por primera vez la infraestructura que pondrá el Estado Nacional y dirimir a través de las PASO a sus candidatos legislativos.

Para gran parte del arco opositor este sistema servirá para evitar las negociaciones ásperas de cada cierre de listas y el tendal de heridos que suelen dejar esas instancias. Especialmente de cara a una elección en la que en varios distritos se perfilan dos grandes alianzas entre las fuerzas no kirchneristas: de un lado la UCR, el Frente Amplio Progresista (FAP), la Coalición Cívica, Proyecto Sur y otras fuerzas; y del otro el PRO, el Peronismo Federal y el resto de los sectores peronistas no oficialistas. Y es que, si bien sectores del peronismo no kirchnerista, como el que lidera el diputado Francisco De Narváez, se inclinan por que todos los partidos opositores se junten en un gran acuerdo electoral y diriman a sus candidatos a través de las primarias, tanto la UCR como el FAP descartaron esa alternativa.

En el radicalismo, sin embargo, hay consenso sobre la utilidad que tendrá la instancia electoral de las PASO luego de la fallida interna que en 2011 iban a disputar Ricardo Alfonsín, Julio Cobos y Ernesto Sanz. Las elecciones primarias de agosto son especialmente valoradas por la UCR para distritos como la Ciudad y la provincia de Buenos Aires, donde el partido mostró intenciones de ser parte de una coalición amplia.

Parte de esa movida sería el FAP de Hermes Binner y Margarita Stolbizer, dos dirigentes que se pronunciaron públicamente a favor de dirimir las candidaturas en las PASO. El socialista será el postulante de su partido en Santa Fe, distrito habituado a las elecciones primarias. Mientras que la líder del GEN terminará en diciembre su tercer período como diputada nacional por la provincia de Buenos Aires y podría buscar renovar su banca. “No descartamos ni una elección interna ni lo que son las PASO. Vamos a tener candidatos en todo el país”, destacó Binner al respecto.

En la Ciudad de Buenos Aires, sin embargo, es donde se daría una de las primarias más atractivas de agosto. Figuras de fuerte peso electoral como Fernando “Pino” Solanas, Elisa Carrió, Victoria Donda, Ricardo Gil Lavedra, Graciela Ocaña y Gabriela Michetti, por mencionar algunos, cavilan por estas horas si se postularán en una elección que definirá 13 diputados y 3 senadores. Varios de ellos, además, podrían hacerlo por un mismo espacio, ya que es en este distrito donde la UCR, el FAP, Proyecto Sur y la Coalición Cívica tienen las conversaciones más avanzadas para unirse.

Para el PRO, que todavía no tiene representantes en la Cámara alta, esa será la elección a ganar y tiene dos candidatos claros para liderar la boleta de postulantes al Senado: la actual diputada Michetti y el jefe de Gabinete porteño, Horacio Rodríguez Larreta. De mantenerse la disputa entre ambos hasta agosto (aunque el funcionario también evalúa presentarse como primer candidato a legislador porteño), ella intuye que sería más favorecida por la competencia en las PASO. Sin estructura pero con una alta imagen entre los porteños, Michetti podría hacer prevalecer su candidatura por sobre la de Rodríguez Larreta en esa instancia.

Fuente: Cronista.com