LABORAL
Alimentación acuerda un aumento salarial del 37% y suma presión a los precios
Con mucho esfuerzo y tras casi dos meses de negociaciones, el Ministerio de Trabajo logró ayer destrabar la discusión salarial en la industria de la alimentación y sellar un entendimiento que descomprime el escenario de conflictividad instalado en la actividad. Sin embargo, el acuerdo significó un nuevo revés para el plan oficial de contener los aumentos en un tope del 30%: el convenio firmado ayer por el gremio y la cámara empresaria del sector fijó un incremento que redondea un 37%, similar al nivel sellado en abril en la paritaria aceitera y próximo a la pretensión de los sindicatos enfrentados al Ejecutivo nacional, con los Camioneros de Hugo Moyano a la cabeza.
El entendimiento entre la Federación de Trabajadores de Industria de la Alimentación (FTIA) y de la cámara que agrupa a las empresas de la actividad se definió en la madrugada de ayer (se firmó por la tarde) y permitió el levantamiento del paro de 4 horas por turno de producción que el gremio inició el viernes pasado, medida que había generado preocupación por posibles faltantes de algunos productos.
El acuerdo firmado fijó un incremento escalonado del 35% (20% con los salarios de mayo y el 15% restante con los sueldos de septiembre), además de una suma no remunerativa y por única vez de $ 1.500 que las fábricas abonarán a su personal durante la primer semana de enero. Según explicaron fuentes gremiales, el aumento acordado elevará el salario básico de la actividad de los actuales $ 6.300 a $ 8.505 una vez que se completen en septiembre los dos tramos de la suba.
El nivel de recomposición que beneficiará a unos 80.000 operarios de la industria alimentaria replica el nivel de aumento sellado previamente en la negociación salarial de los aceiteros, la primera paritaria en conseguir una mejora bastante por encima del tope del 30% que el Gobierno fijó como referencia a partir de la paritaria metalúrgica y que logró imponer en más de una decena de actividades.
Los cierres de aceiteros y alimentación animan las expectativas del sindicato de Camioneros de obtener un incremento por encima del techo oficial. El gremio que lidera el jefe de la CGT opositora retomará mañana su negociación con la Federación Argentina de Entidades Empresarias del Autotransporte de Cargas (Fadeeac), tras el fracaso del último encuentro paritario en el que el sindicato rechazó la propuesta de un aumento escalonado del 26%.
Moyano insistirá en su pedido de una mejora del 40% y ya advirtió con paros sorpresivos si no logra destrabar la paritaria. La amenaza más concreta es la un paro del transporte de combustibles durante el fin de semana largo. En tanto, los gremios ferroviarios continuaron ayer la ronda de negociaciones en la cartera laboral y volverán a reunirse mañana en la apuesta de definir el incremento salarial anual. Tras haber logrado para el trimestre marzo-mayo el pago de una suma fija de entre $ 1.200 y $ 2.500 a cuenta de la paritaria, los sindicatos del sector esperan sellar un incremento en torno al 32%, que se compondría de una mejora porcentual del 28% más un suplemento no remunerativo y el ajuste de adicionales de convenio, en línea con el acuerdo firmado la semana pasada con los choferes de colectivo de corta y media distancia.
Fuente: Cronista.com