Antes de la corrida cambiaria, el mercado inmobiliario creció 48%

La cantidad total de las escrituras de compraventa de inmuebles en la Ciudad de Buenos Aires registró en abril un crecimiento de 47,9% respecto al mismo mes de 2017, al sumar 5.977 registros, según el último informe elaborado por el Colegio de Escribanos de la Ciudad de Buenos Aires. No obstante, bajó 1,7% respecto del mes anterior.

El estudio contempla los movimientos en el sector previo a la corrida cambiaria, que golpeó al buen desempeño del sector y paralizó las transacciones basadas en créditos hipotecarios.

En abril, el monto total de las transacciones realizadas se ubicó en los $17.839 millones, lo que implicó una suba del 99,1% respecto al mismo mes del año pasado. En la comparación intermensual se registró un mínimo descenso del 0,1 por ciento.

El monto medio de los actos fue de $2.984.680, u$s145.381, de acuerdo al tipo de cambio oficial promedio. Esto implica que creció 34,5% en un año en pesos, mientras que en moneda estadounidense subió 2,6 por ciento.

En lo que hace a las escrituras formalizadas con hipoteca bancaria, se registraron 2.198 casos, esto es un 173,4% más que las registradas un año antes. Así, representaron el 36,7% del total, frente a 19,9% de un año antes.

Si se realiza una comparación del primer cuatrimestre, en 2018 se produjo un crecimiento del 37,3% respecto del mismo período de 2017. Es que hubo 20.587 escrituras contra las 14.994 de los primeros 4 meses del año pasado.

En el acumulado de los 4 meses con hipotecas, el salto es importante con las 7.780 registradas: es un 145% de suba (el año pasado el acumulado fue de 3.173).

Cambio de escenario

Sin embargo, en mayo el panorama cambió. Luego de una devaluación cercana al 22% que instaló a la divisa estadounidense en un precio cercano a los $25,50, las inmobiliarias comienzan a sentir el parate.

El presidente de la Cámara Inmobiliaria Argentina (CÍA), Alejandro Juan Bennazar, consideró que el sector atraviesa actualmente "una zona de turbulencia", a pesar de lo cual confía en que esta situación "va a pasar".

En diálogo con Télam, Bennazar mencionó que antes de la suba de la divisa estadounidense había doce llamadas diarias de consulta de interesados a las inmobiliarias, y que ahora se redujeron a una sola llamada.

Por su parte, Alejandro Reyser, socio y director de Red Real Estate Developers, dijo que el alza del dólar ocasionó un impacto negativo y otro positivo: el negativo está relacionado con las personas que tenían aprobado un crédito en pesos, y que ahora no alcanza para comprar la propiedad ya que ahora vale más. "El positivo es que los dólares le rinden más a la gente que compra proyectos estructurados en pesos. Los nuestros son en UVAs", afirmó.

A su turno, Alejandro Ricciardi, gerente de ventas de la inmobiliaria Landa, dijo que "las propiedades valuadas en dólares no modificaron su precio y esto se traduce en un aumento sustancial del valor de la cuota o la cantidad de años de financiación. En algunos casos se vuelve inviable", reflexionó.

En tanto, Leonardo Rodríguez Nader, de la desarrolladora CMNV, sostuvo que "ya en las últimas semanas hubo operaciones con crédito que se cayeron. El banco presta pesos y para comprar una vivienda terminada el mercado exige dólares. En consecuencia, el valor de la propiedad en pesos sube inmediatamente".

Por su parte, Tomás Montoreano, de Fam Inmobiliaria, consideró que "los bancos deberían acelerar el proceso desde que dan el visto bueno al crédito y el plazo para escriturar, están tardando entre 60 y 90 días. Es demasiado tiempo de espera para una persona que cerró en pesos con el banco y en dólares con el vendedor de la propiedad".

Montoreano dijo que "la incertidumbre se da sobre todo en los inmuebles usados, porque esas propiedades están dolarizadas y los créditos se otorgan en pesos, por lo cual si sube el dólar el comprador tiene menor capacidad de compra".

Por último, Matías Santoro, del Grupo inmobiliaro FBA, consideró que "las convulsiones económicas generan incertidumbre. Ante ese panorama la demanda tiende a retraerse y esperar".

Fuente: Diario BAE