COMERCIO EXTERIOR
Argentina y Brasil avanzan en las negociaciones de un acuerdo automotriz
A poco más de un mes de que venza el acuerdo automotriz, los gobiernos y empresarios de la Argentina y Brasil avanzaron ayer en la definición de un convenio puente, de corto plazo, que intente corregir los desequilibrios comerciales entre ambos países hasta acordar un nuevo Pacto Automotor Común (PAC) más contundente y por un período de cinco años en 2015.
Funcionarios de ambos gobiernos y directivos de las cámaras de autopartistas y terminales mantuvieron varios encuentros ayer por la tarde en la sede de Cancillería. Por Brasil, participó la secretaria de Desarrollo de la Producción, Heloisa Meneses, en tanto que por la Argentina, estuvieron el secretario de Planeamiento Industrial, Horacio Cepeda, y la subsecretaria de Competitividad, Mariana González. Primero se reunieron con las cámaras automotrices Adefa y Anfavea y luego mantuvieron un encuentro con los autopartistas de ambos países. Fuentes oficiales y privadas afirmaron que hubo un consenso en prorrogar el PAC hasta el año próximo, pero también en firmar un pacto interino que establezca un nuevo Flex –valor que mide los términos de intercambio y que está vencido desde junio del 2013– y que fije metas de integración de piezas para lograr, por un lado, equilibrar la balanza con Brasil, pero también reemplazar las compras de partes de extrazona por producción regional.
El flex que rigió hasta el año pasado para la Argentina era de 1,95, que implicaba que por cada dólar que el país exportaba a Brasil, podía importar u$s 1,95. Mientras que por cada dólar que el vecino país le vendía a la Argentina, podía comprar por u$s 2,5. El objetivo del gobierno de Cristina Fernández es lograr que el flex de Argentina baje a 1,3, que implicaría que por cada dólar que el país le venda a su socio comercial, pueda importar mucho menos que antes.
Fuentes oficiales aseguraron que aunque la discusión por el flex comenzó ayer algo ríspida, finalmente las partes alcanzaron un consenso, que terminarán de pulir hoy por la mañana en la segunda ronda de encuentros. Esta vez, no participarán los empresarios.
En cuanto a las metas, el objetivo del Gobierno es lograr un compromiso brasileño de que incrementará fuertemente sus importaciones de autos y piezas de la Argentina. Existe una gran preocupación entre los funcionarios y empresarios nacionales por la situación del sector automotriz, que no sólo se ve afectado por la merma del consumo interno sino también por la caída de la demanda de Brasil. También el gobierno de Dilma Rousseff pretende venderle más a la Argentina, pero admite el desequilibrio y está dispuesto a acordar metas para nivelar la balanza comercial, que el año pasado cerró con un rojo para el país de u$s 4.000 millones.
Los gobiernos también dejarían por escrito en el acuerdo puente que comenzarán a trabajar en el nuevo protocolo automotriz para definir cambios en los requisitos de origen de las autopartes y para incrementar los aranceles extrazona, de modo de desalentar la compra de piezas chinas y europeas, según quedó planteado ayer en el encuentro con los privados. “Se le planteó que, además de metas, necesitamos instrumentos más concretos para que se cumplan esos objetivos, pero los gobiernos dijeron que necesitaban más tiempo para eso”, señaló un empresario autopartista.
Fuente: Cronista.com