Desde 2015, el dólar subió 291% y la deuda per cápita se disparó 420%

El dólar se disparó 291% desde diciembre de 2015. La deuda per cápita aumentó 420%. El precio de los alimentos saltó hasta 440%. Las tarifas aumentaron hasta 3000%. Y se perdieron 107.933 empleos industriales. Esos son algunos de los números más impactantes de un informe del Centro de Economía Política Argentina ( CEPA) que analiza los resultados de los primeros tres años de Gobierno de Mauricio Macri.

El documento elaborado por el centro de estudios que dirige Hernán Letcher contrasta los datos actuales de distintas áreas de la economía con los que recibió la actual gestión. En todos ellos, el deterioro es muy importante.

Dólar

Desde el cambio de gestión a hoy, la devaluación es una de las principales marcas. En ese lapso, el tipo de cambio avanzó 291%, desde los $9,70 hasta los actuales $38. Hubo dos grandes disparadas: la primera, en el verano 2015-2016, tras la salida del llamado "cepo cambiario", cuando el dólar trepó alrededor del 50%; y la segunda, desde el inicio de la corrida a fines de abril, que hizo saltar al dólar hasta 120% en pocos meses.

Deuda

El informe del CEPA también destacó al endeudamiento como una de las marcas registradas del ciclo de Cambiemos al frente del Estado. A partir de datos de la Secretaría de Finanzas de la Nación, el estudio advierte que la deuda per cápita se incrementó 420% entre 2015 y 2018. Pasó de US$ 54.402 a US$ 283.380.

Además, de acuerdo con datos del Ministerio de Hacienda, el gasto total en intereses de deuda como porcentaje del Presupuesto subió del 7,5% en 2015 al 17,7%. Es decir, 10,2 puntos porcentuales más.

Empleo

La creación de empleos de calidad no fue un punto fuerte del Gobierno de Macri. De hecho, el CEPA apunta que entre noviembre de 2015 y septiembre de 2018 (último dato disponible del SIPA) se perdieron 51.700 puestos de trabajo asalariados en el sector privado, lo que equivales al 0,8%. Cabe destacar que para que el empleo se mantenga estable en términos reales debe crecer al mismo ritmo que población (alrededor de 1,2% anual).

El sector más castigado, por lejos, fue la industria manufacturera, que durante ese período expulsó 107.933 trabajadores formales. La clave para que eso suceda fue el cierre de 9.609 pymes.

Esa pérdida de puestos asalariados privados fue parcialmente compensada por la generación de trabajo informal e inestable o empleo público. Las incorporaciones al Estado 87.700 en ese lapso, sobre todo en los primeros dos años de gestión, antes del plan de déficit 0% acordado con el FMI.

Inflación

La suba generalizada de precios, que también fue un problema creciente del último mandato de Cristina Fernández de Kirchner, se aceleró con fuerza en la gestión de Macri. En sus primeros tres años, el líder del PRO acumuló una inflación del 160%, según el IPC-CABA. 43 puntos más que en los últimos tres años de CFK, cuando los precios subieron 117%. Este año el IPC Nacional rozará el 50% y será el nivel más alto desde 1991.

Por el impacto de la devaluación, los alimentos se encarecieron abruptamente. De acuerdo a un relevamiento del CEPA, el aceite de 1,5 l. escaló 440% entre 2015 y 2018 y el kilo de harina de trigo subió 315%.

Tarifas

Además de la devaluación del peso, el otro motor de la inflación fue el tarifazo en los servicios públicos. El CEPA precisó que el aumento del gas ya alcanzó el 3008% desde la asunción de Macri, mientras que la luz se disparó 2136% y el agua corriente 515%.

Salarios

Así, la gran víctima de fueron los ingresos de los trabajadores. El informe señala que, según datos del SIPA, el poder adquisitivo del salario privado promedio cayó 22%. Incluso mayor fue el deterioro del salario mínimo vital y móvil, que perdió el 24% de su valor en tres años.

Mientras tanto, reforma previsional mediante, la jubilación mínima se hundió 18,5% en términos reales.

Fuente: BAE Negocios