Distribuidoras estudian cobrar el gas a través de medidores prepagos
Los servicios prepagos ya vigentes en la telefonía celular y en la televisión satelital, ahora comienzan a surgir como alternativa para poder acceder a los servicios públicos. Única forma de afrontar los fuertes incrementos de tarifas que comenzaron en 2016, y que según anunció el ministro de Energía, Javier Iguacel, seguirán con una suba del 25% en el gas y del 30% en la luz. Edenor ya distribuyó 85.000 medidores integrados de energía, está disponible en todos los distritos que abarca la concesión, menos en la Ciudad de Buenos Aires. Edesur no los tiene disponibles. En tres años, Metrogas pasó de tener 16 denuncias de conexiones clandestinas a 540. Será por eso, que la compañía admite estar estudiando la idea.
Si bien Edenor hizo una prueba piloto en 2016, recién a fines del 2017 se los autorizó el Ente Nacional Regulador de Electricidad. Eduardo Mirabelli, vocero de Edenor cuenta: "Los entregamos sin cargo y vienen con una carga gratuita de 350 kilowatts, luego se recargan. El 95% de los que lo pidieron tienen tarifa social y son habitantes de los municipios de Pilar, Escobar, San Fernando, La Matanza, Merlo y Moreno".
El costo de la tarifa plena es de $1,69 el kilowats, pero con el medidor prepago el costo baja a $1,49. Si el cliente tiene tarifa social, Mirabelli explica: "El kw le cuesta $0,40 para los primeros 150 kw que consuma, para los 300 siguientes tiene un descuento del 50% ($0,40) y los nuevos 150 kw tienen un descuento de 25% ($0,60). La tarifa plana para los que tienen tarifa social con el medidor es de $0,80. Todo debe ser consumido en un período de 30 días".
El objetivo de la empresa es claro, si bien admiten que es reducir la pérdida del sistema energético, también es achicar las tasas de morosidad. "Buscamos reducir la pérdida por robos, el volumen de pérdida de energía es significativo", admite Mirabelli. Entre los planes de la compañía Edenor, aspiran a entregar 200.000 medidores prepagos para fines de 2019.
Si bien la clase media, por ahora, no es la que busca esta clase de medidores, el perfil está definido: "Son personas que no tienen ingresos económicos regulares, muchas veces hacen changas o son cuentapropistas y tenían medidores comunes que al no pagar, se les cortaba el servicio. El ir y volver es desgastante. Muchos viven en asentamientos que no están urbanizados, donde antes existían medidores comunitarios que muchas veces pagaban los municipios. Ahora, los municipios alientan la instalación de medidores para reducir sus gastos", explica el vocero de Edenor.
En el caso del gas, Metrogas admite que no descarta la idea, aunque su vocera Eleonora Turk, explica: "En el caso del gas natural, las medidas de seguridad que requiere el servicio, implica otro tipo de infraestructura". Pero admite que es una idea". Si bien la compañía admite un nivel de morosidad bajo, su programa Transparencia donde se registran denuncias por conexiones clandestinas pasó de 16 a 540 denuncias del 2015 hasta ahora. Medir el consumo y poder acceder a un servicio público por pago adelantado, parece ser la única alternativa para muchos.
Fuente: Diario BAE