POLÍTICA ECONÓMICA
El Gobierno reducirá impuestos a terminales si justifican subas de precios
El Gobierno nacional se verá cara a cara esta semana con los empresarios de las terminales automotrices con producción local para intentar conocer las estructuras de costos de cada firma productora de autos. La idea del equipo económico que conduce el ministro Axel Kicillof y que supervisa desde la Secretaría de Comercio Augusto Costa es obligar a reducir los precios de los automóviles como condición de rever el impuesto a los autos de alta gama.
Luego de un encuentro que se realizó el viernes pasado entre Kicillof y la ministra de Industria, Débora Giorgi, y las terminales automotrices, el siguiente paso consiste en encuentros particulares entre cada empresa productora de autos con el Gobierno. Allí “se discutirán precios”, adelantó una fuente del sector empresarial a BAE Negocios.
Kicillof quiere que las automotrices, cuya producción se desplomó desde el inicio del año y aún se desconoce su piso de caída, abandonen la estrategia de aumentos de precios para evitar la pérdida de rentabilidad, aún a riesgo de perder volumen de producción. Según el análisis gubernamental, existió un incremento “por encima de los valores de la devaluación de febrero y el aumento de costos en la cadena de valor”.
La propuesta de Economía e Industria (carteras que llevan a delante los análisis y las negociaciones) es un retroceso de los valores de los autos para atender después el reclamo por el aumento del impuesto a los autos de alta gama.
La preocupación de las terminales es que “en el corto plazo los autos de consumo medio sean alcanzados por el impuesto de alta gama”. Por este motivo, reclamaron que “al menos” haya una corrección de los valores del alcance impositivo.
Fuentes empresarias consultadas por este diario descartaron la posibilidad de retrotraer las costos al público a la marca de enero. “No hay margen para bajar los precios”, enfatizaron desde una de las terminales más importantes.
Las mismas fuentes aclararon que en el encuentro que se realizó el viernes pasado “no se habló de suspensiones sino exclusivamente de precios”. “La idea es continuar en ese mismo sentido”, detalló.
En igual dirección, desde la administración nacional analizan lanzar una línea de crédito subsidiada para alentar la compra de autos 0km. La incipiente propuesta fue compartida tanto con las cámaras de las empresas terminales y de concesionarios (ACARA) como con el Sindicato de los trabajadores del sector (SMATA).
La iniciativa fue aplaudida por ACARA y SMATA aunque encontró resistencia en la Asociación de Fábrica de Automotores) como en AFAC (Asociación de Fábricas Argentinas de Componentes). Sucede que, de mantenerse el nivel de precios cuestionado por el Gobierno, la línea de créditos potenciaría la compra de autos baratos provenientes de Brasil.
En el medio de la puja por los precios, y con un contexto de suspensiones en algunas terminales automotrices por la baja de producción, se espera un acuerdo definitivo con Brasil por el Pacto Automotor Común (PAC), y las consecuencias de la negociación que lleva a cabo el Mercosur con la Unión Europea para delinear las condiciones del libre comercio entre los países de la región con el viejo continente.
Preocupa a UIA los conflictos
Integrantes de la conducción de la Unión Industrial Argentina (UIA) retomaron sus preocupaciones por el nivel de conflictividad laboral, aún a pesar de haberse concluido en la mayor parte de las empresas el período de discusiones paritarias.
Si bien no existió un posicionamiento reciente de toda la mesa de conducción en donde se manifieste la central fabril, algunos de sus integrantes comenzaron a mostrar cierta inquietud por un efecto contagio de conflictos locales en empresas, y que de este modo se haga “moneda corriente” en el clima laboral.
“No es momento de parar la producción porque existe una situación de amesetamiento en la demanda laboral producto del achicamiento de la producción. Además, muchas empresas optaron por evitar suspensiones y despidos a costa de trabajar casi con rentabilidad cero con el objetivo de evitar conflictos. Si hay medidas de fuerzas constantes, se torna inviable”, dijo alarmado un empresario.
Fuente: BAE