Estudian decretar la emergencia estadística
La situación en la que se encuentra la elaboración de los datos oficiales es de tal gravedad que el nuevo director del Instituto Nacional de Estadísticas y Censos (INDEC), Jorge Todesca, está evaluando lanzar una suerte de "emergencia estadística", según comentaron ámbito.com fuentes cercanas al gobierno.
Esta medida tendría el propósito de permitirle a las autoridades del INDEC acelerar los procesos burocráticos y por lo tanto acortar los tiempos necesarios para la tarea de reconstrucción del organismo. Es que si bien se podría presumir que la situación en el Indec era complicada "el daño es mucho más de lo imaginable" comentan en el organismo estadístico.
Dada esta situación y hasta que se normalice la situación el país continuaría sin estadísticas "es mejor no tenerlas a que sean no confiables", explican.
Por esta razón, no sólo no se conocería el índice de precios (deberían haberse difundido el 16 de diciembre pasado, según el cronograma previsto) sino también otras mediciones importantes como las referidas a la actividad, balanza comercial, entre otras en virtud de las "serias irregularidades" con que se encontraron las nuevas autoridades.
"El INDEC es tierra arrasada. Por ejemplo los directores del índice de precios al consumidor huyeron", anunció Todesca en la conferencia de prensa que dio para referirse a la situación del organismo hacia mediados de mes, cuando asumió sus funciones. En esa oportunidad, el funcionario anunció que se suspende la difusión de los datos de inflación, producto bruto interno (PBI), pobreza y comercio exterior hasta tanto puedan elaborarse cifras confiables.
En los últimos años las estadísticas elaboradas por el INDEC fueron motivo de críticas tanto internas como externas. El 1 de febrero de 2013, el Fondo Monetario Internacional (FMI) emitió una declaración de censura, y en diciembre del mismo año pidió a la Argentina a implementar acciones específicas para hacer frente a la calidad de sus datos oficiales del PIB de acuerdo a un calendario establecido. El 3 de junio de 2015, el Consejo Ejecutivo del Fondo reconoció las conversaciones en curso con las autoridades argentinas y su progreso material en la reparación de la disposición incorrecta de los datos desde el 2013, pero se encontró que algunas acciones especificadas que pidieron a finales de febrero 2015 aún no se habían aplicado por completo, según informó el FMI oficialmente. El Consejo Ejecutivo del organismo multilateral examinará de nuevo esta cuestión el 15 de julio de 2016.
Los índices de precios elaborados por el INDEC también fueron cuestionados por el Fondo. Como en el caso anterior, también hubo una declaración de censura por parte el FMI en febrero de 2013. Bajo la gestión del ex ministro Axel Kicillof, la publicación de un nuevo IPC Nacional fue recibida por el Directorio Ejecutivo del FMI como una respuesta de la Argentina a la demanda del organismo por que se mejore la calidad de sus datos oficiales de precios. El 3 de junio de 2015, el Consejo Ejecutivo del Fondo reconoció las conversaciones en curso con las autoridades argentinas y su progreso material en la reparación, pero, según señaló el FMI, se encontró que algunas acciones específicas solicitadas por el final de febrero 2015 que aún no se habían aplicado por completo. El Consejo Ejecutivo examinará de nuevo esta cuestión el 15 de julio venidero.
Las cifras sobre la evolución del comercio exterior también fueron observadas por consultoras locales. Un trabajo de Ecolatina sostiene que de acuerdo a los datos de la Base Usuaria provista por el INDEC, que incluye todas las operaciones de comercio exterior de bienes registrado en aduanas, el saldo comercial acumuló en los primeros nueve meses del año un rojo de 1.716 millones de dólares. Este dato contrasta con los datos divulgados también por el INDEC a través del informe del Intercambio Comercial Argentino, que muestra un superávit de 1.552 millones de dólares en el mismo período.
La discrepancia entre las dos fuentes del INDEC no es sorpresiva, sostiene la consultora, ya que desde hace casi tres años se registran diferencias significativas entre los datos del Intercambio Comercial Argentino y la Base Usuaria. Por caso, en 2013 la primera fuente informó un superávit comercial de 8.000 millones de dólares mientras que la segunda mostró un excedente que rozó los 3.000 millones de dólares. El año pasado se registró otra diferencia sustantiva: según los datos del Intercambio Comercial el superávit alcanzó 6.654 millones de dólares mientras que el saldo fue positivo en sólo US$ 2.100 millones según la Base Usuaria. Es decir, una diferencia de 9.580 millones de dólares acumulados en esos dos años.
Fuente: Ambito.com