Expectativa por acuerdo textil en Tierra del Fuego
Desde hace tiempo el sector textil de Tierra del Fuego venía siendo denunciado por sus pares del continente por aprovechar el régimen de promoción industrial para sacar ventajas y competir en forma desleal con los productos provenientes de la isla. Después de tanta queja el Ministerio de Industria decidió intervenir, y a partir de una mesa con lugar para todos los actores textiles, impulsó un acuerdo entre el Gobierno de Tierra del Fuego y el Instituto Nacional de Tecnología Industrial (INTI), que apunta a un mayor control sobre los procesos productivos para exigir a las empresas allí radicadas que realicen inversiones para dar mayor agregado de valor con más contenido de componentes nacionales.
Para entender las expectativas generadas en torno al acuerdo, hay que explicar lo que sucede en la actualidad. Sin dudas el régimen de promoción industrial le vino muy bien al sector electrónico, que lo aprovechó para ensamblar productos, dándole origen argentino, pero además para copiar procesos que con el tiempo redunda en un mayor valor agregado y también en componentes nacionales. Lejos de este ejemplo, el segmento textil de la isla, que emplea a 1.200 personas, se dedicó más bien a importar productos terminados para luego venderlos en el continente con un valor agregado mínimo, aprovechando los beneficios fiscales.
"Algunas empresas radicadas en Tierra del Fuego abusaron en los últimos 8 años con seudoprocesos industriales aplicados en productos semielaborados importados, prácticamente sin generar valor agregado o un valor agregado mínimo que les daba origen nacional y permitía a ese producto importado ingresar al continente y encima al industrial desgravar impuestos y aranceles. Por otro lado los volúmenes no se condecían con la capacidad instalada, con lo cual estas empresas abusaron totalmente del régimen de promoción. A aquellos industriales que producen en forma leal, hay que respetarles los beneficios promocionales y a aquellos que están abusando habría que sacarles el beneficio", explicó Jorge Sorabilla, presidente de la Fundación Protejer a Ambito Industrial+Pymes.
A partir de que el propio régimen permite cada cinco años una revisión de los procesos industriales, a partir de un trabajo conjunto del Ministerio de Industria, el Gobierno de Tierra del Fuego y la industria textil, se relevaron todas las empresas productoras textiles de esa provincia y se determinó que dos fábricas presentaban consecuencias indeseadas por abusos en el régimen de promoción, lo que determinó los lineamientos de acuerdo en donde se busca subsanar esos efectos indeseados y la malicia de los empresarios.
El convenio fue suscripto por la gobernadora de Tierra del Fuego, Fabiana Ríos, y el vicepresidente del INTI, José Luis Esperón, durante un encuentro en el despacho de la ministra de Industria Débora Giorgi, y representantes de toda la cadena del sector textil, como el propio Sorabilla; el secretario adjunto de la Asociación Obrera Textil, José Listo; el titular de la Cámara Industrial Textil de Luján, Alberto Nicosia, y de la Federación de Industriales Textiles de la Argentina (FITA). También participaron el secretario de Industria, Javier Rando, y la subsecretaria del área, Stella Maris Ayala, y la gerenta de Comercialización del INTI, Patricia Marino.
La intención es que el INTI comience a validar las pruebas y ensayos sobre los dos nuevos procesos productivos para el tratamiento de tejidos con coberturas plásticas y la tintorería de tejidos. Entonces, se revisará el valor agregado de las telas usando los laboratorios del INTI y por otro lado se les exigirá a las empresas inversiones productivas para agregar valor y un 30% de materia prima nacional. Si se cumplen las expectativas los empresarios calculan que se podrían generar 10 mil puestos de trabajo y un impacto positivo en todo el sector textil.
Aunque Sorabilla se mostró conforme con el acuerdo, consideró que "habría que controlar los volúmenes de producción en función de la real capacidad instalada de las fábricas para calcular los beneficios promocionales. También calcular el costo fiscal de ese volumen y poner un techo, porque el régimen, el otro problema que tiene, es ser demandante de divisas, porque está concebido para darle valor agregado a productos importados. Las empresas compran la tela terminada que viene del sudeste asiático, y afecta a la balanza de divisas del sector que es deficitaria. Hay que tener en cuenta que por Tierra del Fuego ingresa el 10% de las importaciones textiles".
Fuente: Ambito.com