ECONOMÍA
Inmobiliarias estiman fuertes bajas en las operaciones y cancelan su cena anual
El mercado inmobiliario continúa dando señales del muy mal momento por el que le toca pasar a raíz del corralito cambiario.
A los constantes informes que muestran que el mercado se encuentra en baja desde hace meses, ahora se suma un dato que marca también una realidad. La Cámara Inmobiliaria Argentina (CIA) acaba de suspender la tradicional cena anual que realiza desde hace siete años en forma ininterrumpida, pero que este año no se hará.
“No tenemos absolutamente nada que festejar. La realidad del mercado es realmente un desastre y decidimos que no hay motivos para realizar un evento que para nosotros es sinónimo de festejo”, reveló a El Cronista Néstor Walenten, presidente de la CIA.
“La caída que viene mostrando la actividad es realmente fuerte; ya ingresamos en un ritmo en el que a ‘muchos’ les cuesta ‘muchísimo’ y lo peor es que no se ven síntomas de que algo pueda cambiar en el corto plazo”, sostuvo el directivo inmobiliario.
En ese sentido, Walenten precisó que la preocupación del sector es que no sólo el negocio se viene destruyendo durante los últimos meses, sino que las estimaciones de los especialistas son muy malas. Armando Pepe, titular de la consultora que lleva su nombre, por ejemplo, entiende que el nivel de “escrituración neta” de inmuebles durante septiembre mostrará una reducción nada menos que del 70% respecto del mismo mes de 2011.
“El problema es que acá no pasó nada nuevo, por lo que no tenemos por qué pensar que la situación debería mejorar. Estamos observando caídas muy importantes, y creo que este mes vamos a rozar el 70%”, dijo Pepe. Cuando el empresario inmobiliario hace referencia a la “escrituración neta”, se refiere a la actividad que se produce concretamente durante ese mes. Las cifras que divulga el Colegio de Escribanos de Buenos Aires, por ejemplo, toman en cuenta los documentos firmados en determinado lapso, aunque en muchos casos pueden tener que ver con operaciones que ya habían sido realizadas tiempo atrás, pero que se firman ahora. Se haga el cálculo de la forma en que se haga, lo cierto es que de cualquier modo el resultado es demoledor.
Por ejemplo, el último relevamiento del Colegio de Escribanos resaltó que las cifras actuales son peores que algunos indicadores tanto de la crisis de 2001 como de 2008-2009.
Allí, se expuso que durante julio se cerraron 4.014 escrituras de compra-venta de inmuebles, nada menos que un 27,6% por debajo de la marca de julio de 2011.
Todos los problemas que viene registrando el mercado inmobiliario argentino como consecuencia del corralito cambiario provocaron algunos cambios.
Por ejemplo, los propietarios que tenían sus inmuebles en venta, las retiraron de ese mercado ante la imposibilidad de conseguir dólares. Esto, a su vez, generó un crecimiento en la oferta de viviendas disponibles en alquiler.
“En la medida en que nada mejore, deberemos seguir esperando sentados, porque las operaciones siguen sin aparecer”, concluyó Walenten.
Fuente: Cronista.com

