La Central Obrera reclamará un salario mínimo de $ 1800
La Confederación General del Trabajo (CGT) reclamará a las cámaras empresariales llevar el salario mínimo, vital y móvil a $ 1800, 300 pesos más de los $ 1500 que se cobran en la actualidad.
Sin embargo, aunque existe un fuerte hermetismo en torno de la futura negociación, fuentes de la Central Obrera aseguraron a Tiempo Argentino que “teniendo en cuenta lo que han sido las negociaciones de salario en el primer semestre del año, el piso que reclamaremos para el salario mínimo frente a los empresarios no será inferior al 26%”, que elevaría a $ 1890 el valor con el que comenzarían las negociaciones. Este asunto se deslizó ayer durante una reunión de los delegados regionales de la CGT que representan a todo el país. La pauta de aumento equivaldría al promedio que los sindicatos consiguieron en las 368 negociaciones paritarias.
Es claro que los criterios de los representantes sindicales con respecto al monto que reclamarán a los empresarios no están unificados. Ayer por la mañana el secretario general de la Unión de Trabajadores Rurales (UATRE) y las 62 Organizaciones peronistas, Gerónimo Venegas, consideró que el aumento del salario mínimo debe ser “al menos de 30%”. Es decir, trasladarlo de los $ 1500 actuales a “una suma cercana a los $ 2000”. Sin embargo, por la tarde Julio Piumato, titular del sindicato que representa a los trabajadores judiciales, le contestó que es una “irresponsabilidad” y una “bravuconada” arrojar un porcentaje sin antes sentarse a negociar.
“A mí me encantaría que fuera del 50%, pero eso sería una aspiración personal, lo que hay que hacer es sentarse a dialogar como corresponde, responsablemente, y lograr la mejora que se pueda. Venegas debería ocuparse de combatir la situación de los peones rurales, que es donde más trabajo en negro hay”, aseguró el líder gremial.
El dirigente destacó la convocatoria oficializada por el Ministerio de Trabajo, “ya que desde 2004 el salario mínimo viene creciendo por iniciativa de este gobierno. En épocas de Menem y De la Rúa tuvimos que imponer amparos para que se modifique el mínimo, es muy importante el diálogo tripartito”. Por su parte, fuentes de la Central de Trabajadores Argentinos (CTA) indicaron que están consensuando puertas adentro el nivel que del salario mínimo que llevarán a la negociación, si bien este deberá ir acorde “a los aumentos que ha habido en la canasta básica”.
Desde el sector empresarial tampoco existe una postura claramente definida, aunque algunos sectores adelantaron que el 30% propuesto por Venegas se encuentra muy lejos de lo que están dispuestos a aceptar. En este sentido, el presidente de la Coordinadora de Productos Alimenticios (COPAL), Daniel Funes de la Rioja, aseguró que un aumento de esa magnitud impactaría negativamente en muchas pymes, principalmente aquellas que están instaladas en el norte argentino y que no alcanzan a pagar el mínimo, por lo que llevaría a un aumento de la informalidad laboral. “Desde enero de 2002 a la fecha el sueldo mínimo pasó de 200 a $ 1500, es decir un 650 %, con lo cual el incremento fue superior a la media, y creemos que el aumento de ahora no puede ser muy alto. Además, con la Ley de Enganche que aprobó el congreso hay muchos adicionales de convenio que aumentarían”. El ministro de Trabajo Carlos Tomada, por su parte, se motró cauteloso y evitó fijar una posición al respecto.“Todo va a depender de la conversación y de lo que ha ocurrido en las negociaciones colectivas que están siendo concluidas”, subrayó. Tomada le reclamó a empresarios y sindicatos que mantengan una actitud prudente hasta tanto no llegue la hora de la negociación.
(Tiempo Argentino)