La Corte de EE.UU. decidirá sobre la causa buitres antes del 30 de septiembre

La Cámara de Apelaciones de Nueva York se abstuvo de contestar si deja sin efecto el fallo del juez federal, Thomas Griesa, para los bonos que no tienen legislación en esa ciudad, aunque podría dar una respuesta antes del 30 de septiembre al pedido, que había sido realizado por el Citibank y Argentina.

Nuevamente, los tres jueces de la Gran Manzana (Barrington Parker, Rosemary Pooler y Reena Raggi) se “abrieron” y dejaron firme la sentencia de Griesa, por la cual el país no puede cancelar con sus acreedores los vencimientos de deuda.

Lo que hizo en realidad el tribunal fue abstenerse de tomar una decisión, frente al reclamo presentado originalmente Citigroup pero del cual participaron los abogados del estudio Cleary Gottlieb Steen & Hamilton, que representan a la Argentina. Ahora, los tres jueces, que en su momento podrían haber dado de baja la moción de Griesa y “salvado” al país, anunciaron que le darían una respuesta al banco antes del 30 de septiembre.

Ese día se debería hacer la cancelación de un nuevo vencimiento de los bonos soberanos, y el Citi buscaba con esta apelación que la Cámara lo autorice a pagar los títulos argentinos que no están inscriptos bajo legislación estadounidense. En la última fecha, fue el mismo Griesa el que permitió a la entidad cancelar esos intereses, pero solo por esa única vez.

Ahora, el tribunal del Segundo Distrito dejó firme la instrucción original, por lo que, a priori, el Citi quedaría en falta con los acreedores. Por eso, le advirtió a la cámara que el banco podría sufrir serio daño, pero aseguró que acatará lo que la Justicia le dicte.

Los representantes de la entidad financiera, que en el pago previo debieron “pelearla” con Griesa a través de varios pedidos de clarificación, se mostraron preocupados por la situación.

La abogada Karen Wagner, que representa a la firma bancaria, subrayó que “sin duda” antes del último día del actual mes iban a recibir un nuevo depósito de dinero desde la administración de la presidenta, Cristina Fernández, para transferirles a los tenedores de bonos de deuda reestructurada. La colegiada insistió en que la legislación de Argentina obliga a su compañía a realizar las operaciones que bloquea Griesa, y que eso comprometería al Citi.

“Tenemos una pistola en nuestra cabeza y si obedecemos, seguramente se disparará‘, le planteó la abogada del Citi a la Cámara de Apelaciones del Segundo Circuito de Nueva York.

El Citi es la primera entidad que pudo sortear la sentencia de Griesa y pagar, tanto en pesos como en otras monedas, el vencimiento del 30 de junio último.

Desde el Gobierno quitaron importancia al hecho de que la Cámara no haya dado respuesta y aseguró que siempre ese tribunal se toma un tiempo considerable para contestar. De hecho, ayer la embajadora argentina en Estados Unidos, Cecilia Nahón, no se comunicó con el ministro de Economía, Axel Kicillof, para informarle detalladamente cómo fue la reunión, como hace siempre en estas instancias.

Como en casi todas las audiencias, estuvieron al pie del cañón los enviados de los buitres. Uno de los abogados litigantes, Roy Englert, repudió el pedido del Citi, y argumentó que no se puede discriminar a los bonos por su legislación, ya que la orden del magistrado Griesa alcanza a todos los títulos reestructurados en 2005 y 2010, sea cual sea el destino de pago.

Desde el entorno de Kicillof aseguran que ese es el punto en donde la disposición judicial se contradice, y que a futuro solo alcanzará a los bonos de los neoyorquinos. Es esa la estrategia oficial a partir de ahora: encapsular el fallo Griesa a la Gran Manzana y que se liberen los pagos de todo el resto del Globo desde Argentina.

Fuente: Diario BAE