INTERNACIONAL

La UE y EE.UU. evalúan enviar ayuda financiera a Ucrania

La Unión Europea (UE) evalúa ofrecer incentivos financieros masivos a Ucrania para aumentar su influencia en el país, pero el dinero sólo fluirá si Kiev aprueba un gobierno de transición en el que participe la oposición liderada por Vitali Klitschko.

Se trata de intentar "ayudar a Ucrania a ponerse en su camino europeo, porque que creemos que ese es el camino que prefieren la mayoría de los ucranianos", confirmó el presidente de la Comisión Europea, José Manuel Durao Barroso, reaccionando a declaraciones anteriores de la jefa de la diplomacia europea, Catherine Ashton, a quien la espera en Kiev para mantener conversaciones sobre ese paquete de ayuda.

Citada por el diario "The Wall Street Journal", Ashton había señalado que la UE y Estados Unidos estaban trabajando en un plan de ayudas a corto plazo para Ucrania con el objetivo de respaldar al país durante la etapa de transición, con un gobierno interino que iniciara importantes reformas económicas y políticas, además de convocar elecciones presidenciales.

De ese modo no sería necesario que Ucrania firmara un acuerdo a largo plazo con el Fondo Monetario Internacional (FMI), destacó Ashton.

En Washington, la portavoz del Departamento de Estado, Jen Psaki, confirmó las conversaciones con la UE, pero subrayó que éstas están todavía en una fase "muy preliminar". "El próximo paso es la creación de un nuevo gobierno (en Ucrania), y después consideraremos qué tipo de apoyo podemos y estamos dispuestos a proporcionar", indicó.

Barroso confirmó por su parte que Bruselas está estudiando con otros socios esas ayudas adicionales. "Debatiremos con otros socios lo que podemos hacer por un país (...) que se encuentra ante enormes retos", señaló. Barroso destacó que la UE es el mayor acreedor internacional de Ucrania pero rechazó una competición con Rusia. La mejor oferta financiera de la UE a Ucrania, dijo, es la apertura del mayor mercado interno del mundo a Kiev.

Las protestas en Ucrania comenzaron precisamente después de que el presidente Viktor Yanukovich se negara a firmar en último momento un histórico acuerdo de cooperación con Bruselas, por presión de Rusia. La situación escaló tras la aprobación a mediados de enero de leyes que restringían las libertades democráticas y en los enfrentamientos violentos murieron al menos cuatro personas, mientras más de 500 resultaron heridas.

Mientras tanto, Yanukovich y Klitschko mantendrán un encuentro, según informó el líder opositor al diario alemán "Bild".

El opositor Arseni Yazeniuk anunció que los opositores están dispuestos a asumir responsabilidades de gobierno. "Hasta ahora sólo hemos debatido un modelo: que la oposición asuma la total responsabilidad", dijo el ex ministro de Exteriores en el canal 5 crítico con el gobierno. "Eso significa que nosotros (...) sacaremos el país del agujero en el que el gobierno y el presidente lo han metido".

Antes, Yazeniuk y Klitschko habían rechazado una oferta de Yanukovich para asumir puestos clave en el gobierno e insistían en la dimisión de Yanukovich.

El presidente del Parlamento, Vladimir Rybak, destacó que Yanukovich no ha ofrecido aún nadie el puesto de jefe de gobierno, tras la dimisión de Nikolai Azarov hace en torno a una semana por la presión de la oposición. Además de Yazeniuk, el empresario Pyotr Poroshenko y el hasta ahora vicejefe de gobierno Serguei Arbusov son considerados candidatos.

Yanukovich advirtió por el extremismo y el odio en la ex república soviética. "El vandalismo por la ocupación de instituciones estatales y los llamamientos que se oyen recuerdan a las enseñanzas del pasado", dijo durante una mesa redonda sobre el proceso democrático y los peligros del radicalismo. El gobierno de Kiev ha calificado a una gran parte de los manifestantes de radicales de derecha y antisemitas.

Sin embargo, el gobierno y la oposición extraparlamentaria llegaron a un acuerdo para la puesta en libertad de manifestantes arrestados a cambio de la retirada de administraciones ocupadas en Kiev, informó la prensa.

Según las informaciones, las autoridades pondrían en libertad a más de cien manifestantes. Como contrapartida, los manifestantes se retirarían de los edificios públicos ocupados en Kiev y levantarían sus barricadas de la calle Gruschevski, en el barrio gubernamental.

Así lo comunicó en la plaza Maidan de Kiev un portavoz de las "fuerzas de autodefensa", según informaron medios locales. Sin embargo, la oposición que lidera el ex campeón de boxeo Vitali Klitschko sigue impulsando una liberación de los detenidos sin condiciones.

Por otro lado, Rusia criticó con dureza que Klitschko llamase a la creación de grupos de autodefensa. "Esperamos que la oposición ucraniana se distancie de las amenazas y ultimátums y active el diálogo con el gobierno para encontrar una salida a la grave crisis", dijo el Ministerio de Exteriores ruso.

Además, volvió a acusar indirectamente a Estados Unidos y la Unión Europea de avivar las protestas. "Es muy extraño que dichos pasos provocadores se tomen precisamente tras conversaciones de los líderes de la oposición con representantes de países occidentales", dice el comunicado.

Mientras tanto, dos periodistas rusos denunciaron que fueron secuestrados y golpeados brutalmente por desconocidos en Kiev, que los instaron a abandonar el país.

Además, el opositor presuntamente torturado Dmitri Bulatov señaló su disposición a trabajar por un cambio político en Ucrania. "Continuaré la lucha iniciada por la democracia en Ucrania", dijo desde Vilna, donde recibe tratamiento médico tras ser secuestrado y torturado durante días, según sus declaraciones. Según dijo, sus torturadores casi lo destruyeron físicamente, pero no quebraron su voluntad.

Fuente: Ambito.com