La inversión en nuevas escuelas alcanzó los u$s 1.613 millones

El período 2003-2014 es, junto con el plan quinquenal lanzado por el Presidente Perón para el período 1947-1951, el que registra el mayor número de escuelas construidas en la historia nacional, según un informe del Ministerio de Planificación.

Entre los años 1989 y 1999 se habían construido sólo 7 escuelas y entre 2000 y 2002 ninguna. En contraste, el Programa Nacional + Escuelas, dependiente del Ministerio de Planificación, en sus distintas etapas, comprende la construcción de 2.128 escuelas. Ello supone un total de 10.258 aulas, con capacidad de albergar a 701.960 alumnos entre los niveles Inicial, Primario, Medio Técnica, Artística y Agraria, Especial e Institutos de Formación Docente.

Este ambicioso programa comprende la edificación de una superficie cubierta de 2.401.002 m2 y se intervino una superficie de 72.030.060 m2. Todo ello se logró con un inversión comprometida de u$s 1.613.367.000.

A la fecha se ha finalizado la construcción de 1.742 escuelas entre los niveles: inicial, primaria, secundaria y superior no universitaria, récord histórico para el país, permitiendo el desarrollo educativo unos 700 mil alumnos. Este ritmo de ejecución representa un promedio de 1 escuela terminada cada dos días durante el período 2003-2013.

En el país funcionan 56.469 escuelas entre establecimientos de enseñanza inicial, primaria, secundaria y superior no universitario. Las escuelas construidas en los últimos once años se extienden por todo el territorio nacional utilizando criterios de eficiencia en base a la distribución poblacional y cantidad de escuelas ya existentes para poder cubrir todas las necesidades en materia de demanda educativa.

Es fundamentar destacar que estas inversiones en infraestructura escolar no se ejecutaron en un marco aislado a la política educativa nacional, sino que acompañó decisiones determinantes como fueron por ejemplo las leyes de financiamiento educativo y de educación nacional, dice el informe del Ministerio de Planificación.

La Ley de Financiamiento Educativo, sancionada en diciembre de 2005 en un contexto de avances en la legislación educativa argentina, constituye una norma fundamental para el fortalecimiento de la educación.

Esa norma, introduce mecanismos para la coordinación de la inversión sectorial entre los distintos niveles de gobierno con el objeto de que las erogaciones que la componen alcancen el 6% del Producto Bruto Interno en el año 2010. En el 2002, Argentina destinaba el 2% del PBI a la educación, siendo que actualmente ese objetivo fue ampliamente superado, y hoy se destina un 6,5% del PBI a la educación y la cultura. Posicionándose, según datos de la UNESCO, primera en la región junto a Brasil.

Paralelamente, la Ley de Educación Nacional Nº 26.206, fue sancionada el 14 de diciembre del 2006 y tiene por objeto regular el ejercicio del derecho de enseñar y aprender consagrado por el artículo 14 de la Constitución Nacional y los tratados internacionales incorporados a ella.

Asimismo, define la estructura del Sistema Educativo, haciendo alusión a todos los niveles y modalidades del Sistema Educativo Nacional, y establece la enseñanza media obligatoria. Una medida necesaria para mejorar el nivel educativo de nuestros niños y adolescentes.

Cabe mencionar que, en este contexto, también se creó un plan para las personas que habían quedado excluidas del sistema educativo a través del Programa Nacional de Alfabetización. Desde 2004, se pusieron en marcha 23.000 centros de alfabetización donde 170 mil personas aprendieron a leer y escribir con el apoyo de 14.000 alfabetizadores.

Finalmente, se destaca que Argentina es pionera en materia de educación pública a nivel universitario, donde universidades públicas como la Universidad de Buenos Aires (UBA) se posicionan entre las mejores del mundo. Al presente se crearon 9 nuevas universidades nacionales que contribuyeron al acceso de jóvenes de familias que nunca habían accedido a la educación superior.

El presupuesto universitario aumentó de 0,5% a 1,02% del PBI. En infraestructura universitaria se invirtieron, entre 2003 y 2013, 1.318,911 millones de pesos. La matrícula universitaria creció un 28%, con 1.808.000 estudiantes. Los egresos aumentaron un 68% en una década: de 65.000 en 2001 a 109.000 en 2011.

Los beneficios de estas políticas son visibles en la actualidad, pero asimismo, los resultados de las políticas ejecutadas serán un legado invaluable para el futuro del país, concluye el informe.

Fuente: BAE