Luz y Fuerza pediría un aumento del 35 por ciento en los salarios

El jefe del sindicato de Luz y Fuerza, Oscar Lescano, pidió hoy reabrir las negociaciones salariales de su gremio -que había pactado originalmente un alza de 22 por ciento- y adelantó que "como mínimo" reclamará una suba salarial de 35 por ciento.

"Yo tenía acordado un 22 por ciento y hoy no puedo (pedir) lo mismo, porque veo a todo el mundo arriba del 35 por ciento, y hay gremios que ya están firmando", justificó.

En declaraciones a radio Diez, el gremialista opinó que la "psicosis" de la que habla el presidente de la Unión Industrial Argentina, Héctor Méndez, en alusión a los pedidos de subas salariales, es "producto de que para poder después mejorar las condiciones, las empresas han aumentado todo, con antelación a la discusión de las paritarias".

Lescano contó: "el viernes hemos pedido que se reabra la paritaria, porque yo no he llegado a firmar ni a acordar definitivamente, pero había un acuerdo tácito del 22 por ciento de hace un mes más o menos", explicó, pero insistió con que "hoy todo el mundo está arriba del 35 por ciento".

"Uno busca la prudencia para acompañar un proceso inflacionario, (pero) el poder adquisitivo va perdiendo valor porque va aumentando todo. El (gremio) de alimentos está arriba de 37 por ciento. Cómo puede ser. Bueno, entonces yo no quiero pasar por tonto", planteó.

El dirigente sindical adelantó que "como mínimo" pedirá una recomposición salarial del 35 por ciento, y admitió que esa alza no es ’llevadero’ para todas las empresas.

"No creo que (sea compatible) para todas", reconoció, aunque aseguró que "para el rubro alimentación, y todo lo que sea el rubro comestible, creo que es posible" porque "ellos han aumentado todo".

Al respecto, advirtió : "Después que acuerden, va a ver que en 60 o 90 días va a aumentar todo de vuelta".

En esa línea, el economista y ex director del Instituto Nacional de Estadística y Censos (Indec), Víctor Beker, auguró "indudablemente" una parte de los aumentos salariales que se están cerrando se trasladará a los precios al consumidor.

"Todo indica que se está armando una bomba de tiempo que tendría que estallar después de las elecciones", alertó. En declaraciones radiales, el analista estimó que podría haber un avance inflacionario a partir de julio, "cuando empezarán a sentirse los aumentos de precios motorizados por los aumentos salariales".

Asimismo, sostuvo que las actuales paritarias se están negociando "no en base a recuperar la inflación pasada, sino en base a la previsión de inflación para el próximo período, por lo cual los gremios -que evidentemente no se manejan con las estadísticas del INDEC- están previendo un nivel de inflación de por lo menos el 30 por ciento, y solicitan incrementos en consecuencia". El experto indicó que el hecho de que esos acuerdos "son homologados por el Ministerio de Trabajo" refleja que "ni este organismo, ni los sindicatos, ni los empresarios se fijan en lo que dice el INDEC".

"Cada uno tiene su propia estimación (de inflación) y, como siempre ocurre cuando se destruye la medida de inflación, cada uno agrega algunos puntos más, por las dudas", concluyó.