Nuevo conflicto entre el Gobierno y empresarios por Ganancias

El Gobierno comenzó a pedirle a los sindicatos reclamar a las empresas hacerse cargo del pago parcial o total de los descuentos que el Estado les hace a los trabajadores por el impuesto a las Ganancias, y abrió un nuevo escenario de conflicto con los empresarios.

El Ejecutivo prevé elevar el mínimo no imponible recién después de marzo de 2015, cuando la campaña electoral esté a toda marcha, pero dejó en claro a los sindicalistas que no apoyará las modificaciones estructurales al tributo que la oposición impulsará en el Congreso.

Fuentes empresariales consultadas por NA indicaron que la propuesta oficial a los sindicatos está generando una fuerte preocupación entre las patronales, por lo que el denominado Grupo de los Seis (G6) ya puso al tema como principal en su agenda para la reunión mensual que concretará la próxima semana.

Así, la gestión kirchnerista abrió un nuevo escenario de conflicto con los empresarios, en medio de la recesión económica por la retracción del consumo interno y la demanda externa, y tras la dura batalla que significó la sanción de la Ley de Abastecimiento y el debate sobre quién es el responsable de la inflación.

Jorge Capitanich es el hombre designado por la presidenta Cristina Kirchner y el ministro de Economía para calmar a los gremios y fue quien llevó la idea a los petroleros y bancarios, ante los incesantes reclamos de estos sectores para elevar el mínimo no imponible de Ganancias.

Con esa idea, Capitanich logró frenar el paro petrolero del jueves pasado y ahora pretende que los bancarios suspendan la huelga prevista para 12 y 13 de este mes: les insistirá para que redoblen la presión sobre los bancos, uno de los sectores con mayor rentabilidad en la última década.

El chaqueño tiene una carpeta sobre el escritorio con datos del Banco Central, que preside Alejandro Vanoli: los bancos y financieras bajo regulación reportaron utilidades por 29.169 millones de pesos en 2013 y 19,415 millones de pesos en 2012.

Los datos conocidos hasta julio de este año son más contundentes: el sistema financiero acumuló una ganancia de 29.074 millones en los primeros siete meses de 2014 (117 por ciento superior a la de igual período de 2013) y de casi 45.000 de pesos entre el invierno de 2013 y del de este año. Una convicción delinea la toma de decisiones en la Casa Rosada:

los empresarios ganaron dinero como nunca antes entre 2003 y 2013, por lo que existe un "colchón" para afrontar los reclamos de los trabajadores y mantener la paz social, sin la necesidad de despedir empleados.

Incluso, el mecanismo fue utilizado por la estatal Aerolíneas Argentinas para tranquilizar a los rebeldes pilotos en medio de un conflicto que amenazaba los vuelos: le giró 12,5 millones al sindicato para que compense con 13.598 pesos a cada uno de los trabajadores.

Los empresarios, sobre todo los del rubro industrial, no están dispuestos a aceptar la iniciativa oficial e incluso, aseguran en el sector, las fábricas no están en condiciones de "disfrazar" la idea con el pago de un bono de fin de año dado que están haciendo malabares para no despedir trabajadores.

Y un dato explica por qué el Gobierno no quiere tocar Ganancias: es el tercer mayor ingreso del fisco, con 24.247 millones de pesos sólo en octubre último y un crecimiento del 63,4% anual, motorizado por la expansión de la lista de trabajadores afectados por el tributo por la suba salarial.

Este tributo le aportó al fisco unos 216.500 millones de pesos en lo que va de 2014, de los cuales unos 203.143 millones de pesos fueron aportados por Ganancias Impositivo, que es afrontado por los asalariados que ganan más de 15.000 pesos mensuales y empresas, y sólo 13.356 millones correspondieron a Ganancias Aduanero.

El peso de este impuesto para el fisco es significativo: este año representó el 22,6 por ciento de los 959.247 que ingresaron a la AFIP en concepto de impuestos generales; además, 17 de cada cien pesos que capta la ANSeS para su fondo de garantía de sustentabilidad provienen del tributo.

Fuente: NA