Rusia muestra ante el mundo a la Argentina como socio estratégico
De Vido expondrá hoy al mediodía de Moscú, las 6 en la Argentina, inmediatamente después que lo haga el anfitrión, el director general de Rosatom, Sergey Kirienko; con lo cual será el primer invitado en hablar ante los principales ejecutivos de empresas energéticas nucleares, privados y públicos, de diversos países del mundo.
El ministro mostrará los avances del Plan Nuclear Argentino, los resultados obtenidos entre 2003 y 2014, y los proyectos para los próximos diez años.
Durante la última visita a Moscú de la presidenta Cristina Fernández de Kirchner, en abril pasado, se firmaron diversos acuerdos de cooperación como el de energía nuclear, pero también se selló un convenio con Rosatom para la construcción de la sexta central nuclear de la Argentina.
Será la segunda de uranio enriquecido y agua, después de la quinta central ya pactada con el gobierno chino, y alcanzará 1.200 megavatios de potencia, por encima de los 1.000 estimados para su antecesora y de los 800 y 745 de cuarta y la tercera, Atucha II, recientemente puesta en marcha.
La presencia argentina en Foro Internacional tiene que ver con la asociación estratégica, producto de los avances en energía nuclear alcanzados por el país en la última década, en la cual logró ingresar el privilegiado grupo de diez países en todo el mundo que dominan todo el proceso de uranio enriquecido, desde su producción hasta su manejo.
El uranio se compra en el mercado internacional, pero el combustible, el dióxido de uranio, se produce en el país.
Para la Argentina, formar parte de la élite de países que se congregarán los próximos tres días en el Centro de Exposición Gostiny Dvor, de Moscú, también sera una oportunidad para encontrar financiamiento, clave para el desarrollo de las próximas centrales nucleares.
Las asociaciones estratégicas con naciones como Rusia o China, tiene la ventaja para el país que no traen aparejados condicionamientos a su política económica, como lo fueron históricamente los acuerdos con los Estados Unidos o los países de la Unión Europea.
Tanto con Rusia como con China, existe una reciprocidad y una complementariedad en materia económica.
De Vido, quien llegó a la capital rusa el viernes por la noche, estuvo estos días reunido con su equipo de trabajo, entre quienes están el secretario de Obras Públicas, José López, y el presidente de Nucleoelétrica, José Luis Antúnez.
Tras la exposición del ministro en el Foro Internacional, por la tarde se producirá la inauguración del stand argentino en este encuentro.
Para el martes y el miércoles están previstas reuniones del titular del área de infraestructura con las autoridades de Rosatom y funcionarios del gobierno ruso, con el objetivo de avanzar en la implementación del acuerdo de cooperación suscrito en abril.
Rusia encuentra en la Argentina la plataforma de lanzamiento para el desarrollo de la energía nuclear en el resto de Latinoamérica, a partir de la tecnología de uranio enriquecido y agua.
El uranio enriquecido a largo plazo tiene mayor estabilidad que el petróleo en su valor, dado que hay cada vez mayor disponibilidad de este recurso en el mundo.
Si Argentina sigue creciendo en su desarrollo, va a necesitar de uranio y de petróleo para tener suficiente energía para sostener ese crecimiento.
Argentina tiene enriquecimiento de uranio propio, logro obtenido tras la reactivación de la planta de Pilcaniyeu, en la provincia de Río Negro, y se encuentra en la etapa de fabricación del Carem, un reactor chico de bajo costo, que resuelve la situación de abastecimiento ergético en ciudades medianas.
El prototipo del Carem se desarrolló en Lima, provincia de Buenos Aires, y el primer reactor se va a fabricar en Formosa.
Fuente: Télam