Sector textil creció el doble que el promedio de la economía durante 2012

Cuando aún se aguardan los cálculos oficiales sobre la evolución del PBI argentino en el 2012, la cadena textil sale al ruedo con un dato descollante: el año pasado tuvo un crecimiento de 7% promedio, con una una capacidad instalada de aproximadamente el 80 por ciento.

Los datos fueron aportados a BAE por el titular de la Fundación Pro Tejer, Marco Meloni. “El valor bruto de producción estuvo cerca de los u$s4.300 millones”, especificó.

Al analizar el comportamiento de todo el sector, se destaca el crecimiento en todos los segmentos, con una singularidad: a mayor valor agregado, es superior el salto en la producción. O sea, “los guarismos mejoran a medida que se avanza en los eslabones de la cadena”, ponderó el directivo.

En el universo de los hilados, la suba en la fabricación interanual fue de 1,5%; en los tejidos, 4,5%; tintorería y acabados, un 10%; y finalmente, en la confección, una mejora del 11%, contra el 2011. En relación con estas cifras, un gran papel ocupó la disminución de las importaciones en cada eslabón.

Década

La industria textil pasó a ser una de las industrias más dinámicas, tanto en inversión, como en crecimiento y creación de mano de obra.

En los últimos 10 años, superó la duplicación en los puestos de trabajo, se invirtieron más de u$s2.000 millones, y en cuanto a los niveles de producción, creció el 170 por ciento. De esta forma, se transformó en el período de mayor crecimiento continuo de los últimos 50 años.

La inversión en bienes de capital estuvo impulsada por la orden del Banco Central de que las entidades financieras otorguen el 5% de los fondos para préstamos a la inversión de la industria.

Según datos de la Fundación Pro Tejer, un 69,6% de las empresas ha solicitado créditos al 15%, el esquema promovido por el BCRA.

Un buen ejemplo denotan los telares de tejido plano, donde la compra aumentó en más del 30% contra el 2011, y un 60% de los fondos provinieron de los créditos alentados por el BCRA.

Respecto de la mano de obra, es intensiva en el eslabón de las confecciones y allí, la demanda de personal calificado es alta. Por ello, organismos como el Instituto Nacional de Tecnología Industrial (INTI), la Fundación Pro Tejer y distintas cámaras están trabajando en planes de capacitación.

En este marco, también intervienen el ministro de Trabajo, Carlos Tomada y la ministra de Industria, Débora Giorgi, junto con sus equipos técnicos. Otro de los objetivos generales es relanzar y promover la carrera de Ingeniería Textil.

“Por delante, los desafíos son muy importantes: el crecimiento con inversión, el desarrollo tecnológico y el social. Se está trabajando para el control del trabajo ilegal con innovadores procedimientos”, afirmó Meloni.

Exportaciones

En forma paralela, la Fundación Pro Tejer logró la adhesión de toda la cadena para realizar una misión comercial a los Estados Unidos y México en este año.

De acuerdo con la información que maneja la entidad, los Estados Unidos ofrecen la posibilidad de vender tejidos especiales en plano, tejidos de punto destinado a los hospitales militares y tapicería compleja.

Específicamente, el empresario se refirió al interés de la cadena en desembarcar en todo el sur de los Estados Unidos, como Florida (Miami), California, Arizona, Nuevo México, Texas, Misisipi y Alabama.

Si bien no está determinada la fecha del viaje comercial, sí se sabe que viajarán directivos de empresas de indumentaria, tejidos, hilados y del segmento de la tintorería. “Hoy las ventas son aisladas por parte de un grupo de empresas asociadas a la cámara, y por eso el impulso se le dará este año. La intención es combinar la misión a los Estados Unidos con un viaje a México, donde también observamos un gran potencial para todo el sector”, explicó Meloni. Venezuela y otros países de Latinoamérica están en la mira.

Fuente: BAE