INTERNACIONAL
Según informe de la ONU, continuará la desaceleración de la economía a causa de la recesión en Europa
La desaceleración de la economía global continuará en 2012, impulsada por la recaída de Europa que tendrá este año crecimiento negativo, según el informe sobre El Comercio y Desarrollo 2012 "Políticas para un crecimiento equilibrado e inclusivo" de la Conferencia de las Naciones Unidas sobre Comercio y Desarrollo (UNCTAD).
El informe estima que "la economía mundial se está desacelerando desde 4,1 por ciento en 2010 a 2,7 por ciento en 2011, y que registrará un crecimiento de entre 2 y 2,5 por ciento en 2012".
En 2012, se espera que los países desarrollados crezcan en torno del 1 por ciento, como resultado de una recuperación moderada cercana al 2 por ciento en Estados Unidos y Japón y la nueva recesión en la Unión Europea.
De hecho, las estimaciones de la UNCTAD sostienen que la economía de la Unión Europea compuesta por 27 países, registrará este año crecimiento negativo de 0,3 por ciento.
En cambio, el crecimiento "será mayor en las economías en desarrollo, sostenido por la demanda doméstica, aunque igualmente se desacelerará y crecerá entre 4 y 5 por ciento".
Para América Latina y Caribe, se espera también un crecimiento menor al año anterior, en torno del 3,2 por ciento, ya que "el desacople de las economías en desarrollo respecto de las desarrolladas no puede ser total, y los países en desarrollo también están desacelerando", dijo el economista Alfredo Calcagno al presentar el informe en la sede de la ONU en esta capital.
Según el informe, "los países en desarrollo, impulsados por el progreso registrado en varias grandes economías, dependen menos que antes de las economías desarrolladas maduras y tienen una demanda interna más robusta".
También participó de la presentación para la prensa la coordinadora residente de la ONU en Argentina, Cecilia Ugaz, quien se refirió a la recesión en Europa y dijo que "es nocivo insistir en políticas de austeridad cuando las economías se encuentran ya en una espiral recesiva".
Calcagno sostuvo que "los países desarrollados hicieron el diagnóstico equivocado y están aplicando políticas que tienden a aumentar la desigualdad, como reducción de salarios, reducción del gasto público y la búsqueda de equilibrio fiscal que debilita aún más la demanda".
"La desigualdad afecta la demanda agregada en cantidad y en composición; una distribución desigual del ingreso, más que aumentar el ahorro global aumenta el despilfarro de las clases altas y aplaca la demanda del resto de la sociedad", insistió.
Además, dijo que desde la UNCTAD no comparten "la lectura de los países desarrollados, que creen que la causa de la crisis y la forma de superar la crisis son los ajustes fiscales".
Calcagno dijo que en lo personal esto le resultó "muy evidente por conocer la experiencia Argentina, acá estamos reeditando el tema del `déficit cero`, de pensar que cortando gastos vamos a reducir el déficit".
Lo que hizo Europa fue "cortar el gasto en una situación donde la demanda privada no se ha recuperado con fuerza", y "ahora se dieron cuenta que el sector privado no se ha recuperado pero siguen insistiendo con políticas de ajuste fiscal porque no les queda otra, porque los mercados financieros se van a asustar. Se asustan igual por la falta de crecimiento", afirmó.
En cambio, consideró que "hay margen para políticas expansionistas", y dijo que "por ejemplo Alemania podría ayudar mucho a la recuperación de Europa si gastara más, si pagara mejores salarios".
El estudio elaborado en Ginebra recalca que "la austeridad fiscal y los recortes salariales están debilitando aún más el crecimiento en los países desarrollados sin lograr los resultados esperados de reducción de los déficits fiscales, creación de empleo y renovación de la confianza de los mercados financieros".
En ese sentido, sugiere "recurrir a las políticas fiscales y laborales para reducir la desigualdad del ingreso", ya que "no se producirá una salida significativa de la recesión hasta que los grupos de renta media y baja consigan unos ingresos suficientes para destinarlos al consumo".
El Informe sobre el Comercio y el Desarrollo sostiene que "una distribución más equitativa del ingreso resulta también positiva a largo plazo, pues las disparidades acusadas privan a muchas personas de acceso a la educación y al crédito e impiden la expansión de los mercados nacionales".
Fuente: Télam

