NOVEDADES EDITORIALES

El Lic. Eduardo O. Schiel presenta su nuevo libro: "Curso de Derecho Laboral"

La editorial Aplicación Tributara acaba de publicar recientemente una excelente obra del Lic. Eduardo O. Schiel "Curso de derecho Laboral", un libro que recorre a través de sus páginas cada uno de los puntos relevantes para entender esta temática, tomando como hilo conductor un enfoque que al lector le resultará didáctico, claro y de simple asimilación.

Según palabras de Schiel, este nuevo material constituye un gran aporte para relacionistas laborales, contadores, miembros paritarios, negociadores de convenio, representantes y dirigentes gremiales, legisladores, agentes del área de personal, liquidadores de sueldos, especialistas en higiene y seguridad, médicos laborales, representantes de cámaras empresarias, inspectores, etc.

Mediante una entrevista, el autor nos acerca alguno de los principales contenidos de su nuevo libro, sus expectativas con respecto a la buena aceptación por parte de los lectores y los aportes que su contenido le otorga al derecho laboral.

¿Cómo surgió la idea de realizar este nuevo trabajo?

En los últimos diez años el derecho laboral ha experimentado importantes cambios, y me pareció oportuno que mediante el recorrido de sus diversas instituciones formular una postura crítica al respecto expresando mis adhesiones y diferencias, procurando fundar mis posiciones. Por otro lado, era de mi interés hacer un trabajo al respecto que resulte didáctico no sólo para el abogado sino que también para todos aquellos que en el ejercicio de sus roles profesionales, deben recurrir a bibliografías de este tema en su labor cotidiana: Contadores, relacionistas laborales, delegados gremiales, estudiantes, empresarios, etcétera. Además la editorial no contenía un material específico sobre este tema para.

Paralelamente, tenía mucho artículos previos sobre el tema publicados en la editorial, y sentía que podía hacer un libro que abarque de manera integral al derecho del trabajo. Era algo que me faltaba y siempre tuve ganas de realizar. Digamos que me pude dar el gusto, y terminó siendo una experiencia apasionante de investigación y aprendizaje.

¿Qué aportes considera que este libro realiza en el derecho laboral?

Eso lo veremos con el tiempo, y si las ideas expresadas son adoptadas y disparadoras de ciertos debates. Por lo pronto, el hecho de procurar formular posturas críticas en muchos aspectos, es de por sí un aporte. El derecho laboral es una rama del derecho extremadamente dinámica y donde año tras año tenemos modificaciones. Es por ello que como disciplina jurídica está en permanente construcción. Este trabajo pretendo que sea un aporte más en esa construcción.

¿Cuáles son sus expectativas con respecto a este material?

Más allá de los objetivos comerciales, y de que en un futuro me encuentre trabajando en nuevas ediciones, mi interés se centra en diversos aspectos de naturaleza académica. Por un lado, como acabo de mencionar, que sea un pequeño grano de arena en la construcción que la sociedad realiza en esta disciplina, y por el otro que al lector le resulte didáctico, y se constituya como fuente de consulta.

¿Hacia dónde va hoy por hoy el derecho laboral?

Depende del tema al que nos refiramos. Desde el derecho colectivo, la Corte ya ha dado una postura muy clara con respecto a nuestro modelo sindical, el cual más allá de históricas resistencias, se dirige hacia la pluralidad sindical en consonancia con lo que ocurre en la mayoría de las legislaciones del mundo. En materia de riesgos del trabajo, resulta indispensable una reforma que resulte viable y justa tanto para trabajadores como para empleadores, aquí entiendo que es donde más se pone de manifiesto la Argentina pendular, ya que hemos pasado en no más de 15 años, de las indemnizaciones irrisorias del régimen en su redacción original a indemnizaciones civiles fijadas por la justicia que suelen resultar escandalosamente elevadas en ciertos casos. El fallo “Aquino” con el que estoy jurídicamente de acuerdo en cuanto sus consideraciones, suele ser mal aplicado, y se lo adopta como fundamento para fijar indemnizaciones muy por arriba de lo razonable. Pendularmente nos fuimos al otro extremo, y eso no es bueno. En materia de derecho individual las leyes se modifican conforme las circunstancias del momento y hoy todas las modificaciones son para aumentar la tutela al trabajador, y si bien la protección del trabajador es un principio rector elemental, caer en el exceso de tutela no siempre resulta justo. No estoy en desacuerdo con todas las modificaciones habidas últimamente, por ejemplo la última reforma en materia de trabajo de menores me resultó atinada. En materia judicial ciertas posturas jurisprudenciales son progresistas y justas, otras en cambio me resultan objetables. La última reforma a la Ley de concursos y quiebras, tiene algunos aspectos rescatables, pero por otro lado pone de manifiesto cierto ideologismo, proponiendo a veces soluciones utópicas y en otros casos disparatadas. Otro aspecto que hoy aparece y creo que será objeto de un interesante debate es la idea de hablar de un derecho penal del trabajo, tema que me resulta interesante como eje de estudio, donde mi primer consideración es que cualquier análisis al respecto debe hacerse en base a los principios del derecho penal, resultando incompatible hacerlo desde los principios el derecho laboral.

¿Se deberían realizar reformas en la legislación laboral?

No hablaría de reforma, pero si entiendo que resultaría oportuno efectuar algunas correcciones en la legislación de fondo. Por ejemplo, en materia de tutela en el caso de las mujeres, actualizándola a los criterios axiológicos del hoy día; los encuadramientos convencionales deberían tener una instancia administrativa previa, con una autoridad de aplicación que se expida, y que no mire para otro lado, donde en caso de silencio se pueda solicitar un amparo por mora; se debe adecuar la Ley Sindical a los nuevos criterios judiciales ya que tenemos un vacío legal que genera una enorme inseguridad jurídica, aunque bien sabemos que este tema en particular, para muchos políticos resulte un tabú su simple mención; se debería dar más impulso a la introducción de las nuevas tecnología en lo que hace a los deberes administrativos del empleador, e ir repensando la pesada gestión cotidiana en materia de libros de sueldo, útiles en su momento pero que hoy se podría llevar con más seguridad y facilidad aplicando metodologías propias del siglo XXI, son algunos de los temas que considero revisables, y no tanto ver que artículo de la legislación podemos tomar y meterle alguna reformita que le de algún derecho más al trabajador o en su defecto algún perjuicio más al empleador y que le aparezca a la sociedad en el boletín oficial sin un debate real, más allá del propio formal en la redacción de leyes. No creo que esa sea la forma de dar el debate en materia laboral dado que los actores sociales tienen el derecho a participar y a ser previamente escuchados.

Dado que Usted participa en cámaras empresariales ¿que nos puede decir con respecto a cómo viven las empresas estos cambios en materia de derecho laboral?

Con preocupación por cierto. Hay una cierta sensación empresaria que impera donde se teme que al empleador se lo prejuzga como explotador, abusador, y que cada vez que puede perjudicar a su trabajador lo hace con todo rigor e impiadosamente. Tal sensación de temor, ciertamente es excesiva, pero por otro lado también la manera que el péndulo en ciertos casos defiende en exceso al trabajador es real y torna entendible este sentimiento del lado empresario. A veces ciertos fallos o cambios en la Ley no resultan muy razonables y ello genera incertidumbre y preocupación. Por ello entiendo que debemos tratar de buscar un punto de equilibrio en el marco jurídico que protege al trabajador, ya que cuando parece que lo hemos encontrado sin darnos nos fuimos para el otro lado. Hacia la búsqueda de este equilibrio debe apuntar el debate.

Por Ángeles Bellomo.

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