FACTURAS APÓCRIFAS

Abad se defiende de las acusaciones por caso Skanka

El titular de la Administración Federal de Ingresos Públicos (AFIP), Alberto Abad, presentó un escrito en Tribunales para desmentir los dichos de una persona que, con identidad reservada y bajo juramento, lo acusó de haber participado de una reunión en la que se habría decidido ocultar casos de sobreprecios en obras públicas.

Abad negó "terminantemente" la existencia de ese supuesto encuentro y agregó que los dichos del misterioso testigo son "inverosímiles". La declaración -revelada por Clarín un mes atrás- la recibió el juez en lo Penal Tributario, Javier López Biscayart, que el martes pasado le envió una copia a su colega del fuero federal, Guillermo Tristán Montenegro.

Ambos investigan distintos aspectos del caso Skanska: una millonaria evasión impositiva, por un lado, y posibles coimas y sobreprecios, por otro. Esta poderosa multinacional sueca admitió haber utilizado 118 facturas apócrifas de 23 sociedades a lo largo de 2005 para pagar sobornos; nunca precisó a quién.

Al igual que otras grandes compañías, Skanska participó de la ampliación de dos gasoductos, uno en el norte y otro en el sur del país. La obra fue organizada desde la Secretaría de Energía y controlada por el Ente Regulador del Gas con la administración de Nación Fideicomisos.

En ambos expedientes judiciales, el nombre del testigo seguirá oculto. Sólo consta sobre su identidad que es un ex perito contador de la Corte Suprema.

La declaración tiene 3 carillas. En concreto, lo que aseguró esta persona es que el verano pasado, en la zona del Congreso, vio a Abad por la calle y escuchó que le contaba a otro hombre que había estado en una reunión en la que se había resuelto tapar otros quince episodios de sobreprecios y coimas en la obra pública. "No podía dormir si no lo declaraba en Tribunales", explicó el testigo.

Siempre de acuerdo a sus dichos, confirmados por fuentes judiciales, en esa presunta reunión entre Abad y directivos de Skanska hubo legisladores nacionales y un escribano cuyos nombres no precisó. Tampoco aportó ninguna documentación que sustente sus palabras. "Abad dijo que tenía orden de hacer caer un solo caso", agregó el supuesto perito, según consta en el acta de la testimonial que López Biscayart.

Consultado por Clarín, Abad insistió en que esos hechos son "completamente falsos". Aclaró que suele tener reuniones con representantes de muchas empresas, pero que nunca se encontró con ninguno de Skanska, ni antes ni después del escándalo. (Clarín)