Aumentó la demanda en talleres mecánicos a causa del granizo

Una tormenta de granizo explota sobre Capital Federal y Gran Buenos Aires, destroza miles de vehículos y desata la ira de sus propietarios, quienes comienzan a estimar cuánto deberán invertir para dejar el auto nuevamente en condiciones.

En la otra cara de la historia aparecen –al igual que en 2006, la última vez que el granizo fue protagonista– los chapistas y colocadores de vidrios, que el domingo por la noche se frotaron las manos pensando en el impulso que tendría su negocio. Es que, dependiendo de los daños a reparar, pueden embolsar hasta $ 6.000 por rodado.

De todos modos, los “talleristas” dicen que el gasto promedio por rodado gira en torno de los $ 2.000 y 3.000 pesos.

Un cálculo rápido permite estimar que, a un promedio de 10 autos que pueden tomar por día, el fenómeno meteorológico les dejará a los talleres no menos de 60.000 pesos.

Ayer por la mañana, desde bien temprano, los automovilistas se apostaron el la puerta de los talleres y “sacabollos” de la avenida Warnes y diferentes centros de reparaciones de Capital y GBA, incluso desde varios minutos antes de que los locales abrieran sus puertas.

En varios de ellos, las colas superaban las tres cuadras.

La gran cantidad de afectados por la tormenta que llegó en busca de ayuda quedó reflejada en dos hechos. En primer lugar, los dueños de los talleres aseguran que están “totalmente colapsados”, una situación que supera ampliamente su capacidad de trabajo.

Ante esto, cerraron las listas de atención, por lo que en su gran mayoría ya no reservan turnos hasta pasados los 60 días.

Los precios en los que cotizan los diferentes arreglos varían mucho. Básicamente, como ocurre en todo lo que tiene que ver con este rubro, todo dependerá del lugar al que se acuda. Además, claro, jugará un papel central el auto que se pretenda arreglar. En general, en promedio, para pintar y sacar los “bollos” de un capot se puede cobrar entre $ 1.300 y $ 1.600, contra los $ 1.700 de un techo y los $ 600 de un baúl.

Los parabrisas y las lunetas traseras también tienen precios oscilantes. Para los primeros (y siempre teniendo en cuenta el modelo de auto a reparar) se debe pensar en una inversión que no baja de los $ 700, en tanto que sube hasta los $ 1.000 como piso, aunque puede superar los $ 2.000 en caso de que se trate de autos de alta gama.

Las casas de venta de repuestos para automóviles y los talleres de chapa y pintura de la zona norte y otros puntos afectados por el fenómeno, recibieron hoy gran cantidad de pedidos de repuestos y turnos para reparar los daños provocados por el granizo. La mayor demanda se dio con los vidrios, principalmente lunetas y parabrisas, que fueron los más dañados por la piedra.

Otro de los grandes protagonistas de esta historia es el seguro contra el granizo.

Inexistente hasta la última aparición de estas “piedras heladas”, en 2006, lo cierto es que hoy las compañías aseguradoras las ofrecen a todo aquel interesado en tomar una póliza por un costo extra promedio de $ 150, y que se incluye al segmento conocido en el mercado como “terceros completo”.

Si bien hoy por hoy el granizo es uno de los enemigos más temidos por los automovilistas, lo cierto es que, según especialistas, no muchos tomas las precauciones del caso.

En los talleres, de hecho, ayer sostuvieron que sólo uno de cada cuatro clientes estaba cubierto por su seguro.

Aunque en los talleres lo niegan, algunos automovilistas denunciaron un alza en los precios.

(elcronista.com)