ECONOMÍA

BCRA acelera la devaluación pero continúa perdiendo reservas

El Banco Central aceleró la devaluación más allá de las estimaciones más audaces y, sin embargo, no dejó de perder reservas. Durante la rueda de ayer la entidad conducida por Juan Carlos Fábrega permitió que el dólar mayorista se disparara hasta $ 8,60 –una suba de más de $1,50– antes de vender al menos u$s 100 millones para bajar la cotización y marcar sobre la hora un precio de $ 7,75 para la venta. Las ventas de la autoridad monetaria ayudaron a que las reservas cayeran u$s 180 millones en el día y acumulen una pérdida de u$s 1.336 millones en lo que va del año.

La suba diaria terminó siendo de 61 centavos punta a punta, lo que supuso una devaluación del peso del 7,87% en un sólo día. El miércoles, con una suba de 25 centavos y una devaluación del 3,6% en un sólo día Fábrega se había anotado para su curriculum la mayor devaluación en 12 años. Ayer rompió el amperímetro.

La fuerte suba de la cotización oficial se concretó a pesar de que el BCRA recurrió a sus tradicionales trucos para amortiguar la suba. Los $ 7,75 del cierre son mentirosos, la mayor parte de u$s 308 millones transados ayer se pactaron por encima de los $ 8 (la última operación vendedora que quedó en el Siopel estuvo en ese nivel). Pero, sobre la hora, el Central cerró una operación 25 centavos por debajo de la anterior. Es esperable que en los primeros minutos de hoy, esa diferencia se zanje fácilmente (salvo intervención oficial).

Un vocero del BCRA fue enfático respecto a una cosa: nada de esto fue un error. “Lo que pasó hoy fue parte de la política de flotación administrada. Cuando se entendió que el precio no era el adecuado, se intervino”, dijo como una forma de sugerir que estaban cerca de alcanzar un nivel que consideran deseable. La suba de tasas que debería acompañar esta política ya está en marcha, señalan.

El día caliente de Fábrega incluyó una reunión de directorio teñida por la escalada cambiaria (se celebra todos los martes) y una reunión cara a cara con el ministro de Economía, Axel Kicillof, que fue a visitarlo a la calle Reconquista justo después del cierre del mercado, pasadas las 3 de la tarde.

En la reunión, dijeron desde las partes, se debatió el resultado del experimento de dejar flotar al dólar libremente durante más de rueda y media (el miércoles el Central no intervino y ayer lo hizo sobre el final).

El dólar subió ayer 8,54% en un sólo día, casi lo mismo que en todo el primer año de gobierno de Cristina Kirchner. Acumula una suba de 12,56% en sólo dos ruedas, del 18,84% en lo que va de enero y 56% en un año (lo que es lo mismo que decir que el peso se devaluó 36% en el mismo plazo).

Las sospechas lanzadas ayer respecto de una operación financiera conducida por la filial local de la petrolera anglo-holandesa Shell para desestabilizar al tipo de cambio (ver página 6), apoyada por fuentes oficiales ajenas al día a día monetario, y otra respecto a una pelea entre el ministro y el banquero central, abonaron la hipótesis de dudas oficiales respecto a si Fábrega tiene el control de lo que sucede con el dólar.

Quienes más conocen a Fábrega no fueron proclives a apoyar la hipótesis: el BCRA programa cada compra de relevancia con 10 días de anticipación. Sin autorización de la entidad, nadie compra.

Especulaciones privadas

En las mesas se vivió un día tan excitante como lleno de nervios. Cerca de las 13.10 el dólar se pagaba $ 8,50 y se apostaba por si el BCRA intervendría o no. Ya el miércoles esperaron en vano que los muchachos de Fábrega salieran a vender, algo que no ocurrió.

Tras la intervención y la baja del precio, quedaron los análisis. “No sabemos qué están haciendo, pero pero trabajamos con la hipótesis de que buscan acelerar la llegada a un precio del dólar que les quede cómodo a ellos y al mercado, para volver a una devaluación igual o inferior a la inflación”, dijo un operador bancario. “Ahí, moverían las tasa sobre la inflación”, concluyó.

Alerta reservas

El BCRA informó que tuvo que inyectar u$s 100 millones para bajar la cotización del dólar oficial. En las mesas desconfiaban ayer de esa cifra y estimaban en hasta u$s 150 millones sus ventas del día.

Como fuere, las reservas de la entidad cerraron la rueda en u$s 29.263 millones, u$s 180 millones por debajo de su nivel del día anterior. La caída empujó la sangría de divisas de las arcas de la entidad a los u$s 1.336 millones en lo que va de enero.

El mes va a camino a ser el de mayor caída de reservas desde noviembre, tras haber sido contenida a menos de u$s 200 millones en diciembre.

Fuente: Cronista.com