CGT afirmó que continuará con sus reclamos

Persiste la bronca gremial por las críticas de la Presidenta y admiten fricciones. Afirman que no darán marcha atrás con las protestas necesarias para sostener reclamos.

Pese a su inocultable malestar por la dureza de la acusaciones de “extorsión” que la presidente Cristina Fernández despachó contra la dirigencia sindical, Hugo Moyano optó ayer por evitar una respuesta directa a las críticas de la mandataria en la apuesta de no profundizar la escalada de tensión en la relación con el Gobierno. Con esa estrategia definida, la conducción de la CGT ratificó su apoyo a una eventual reelección de Cristina y reiteró su adhesión al modelo económico impulsado por la administración kirchnerista, pero advirtió que eso no implicará renunciar a sus reclamos ni a las medidas que fueran necesarias para alcanzar sus objetivos en el terreno gremial.

“La Presidenta es la que rige los destinos del país y nosotros somos representantes de un sector. Vamos a acompañar sin que signifique obsecuencia”, aclaró el dirigente Juan Carlos Schmit, quien ofició de vocero de la reunión de ayer de la cúpula de la central obrera. Con el mismo espíritu, el diputado y referente cegetista Omar Plaini reiteró el respaldo de la central obrera a la gestión de Cristina, aunque admitió que existen algunos elementos de “fricción” con el Ejecutivo.

Otro de los gremialistas que participó del encuentro indicó que Moyano pidió expresamente a los dirigentes ser “respetuosos” de la jefa de Estado y “no contestar” sus acusaciones, aunque también aconsejó mantener firmes los reclamos. “Nadie va a salir a enfrentar a la señora, pero si se tiene que ir a un paro o a cualquier medida para reclamar salarios, cada gremio tiene las manos libres para hacerlo”, explicó el referente.

Moyano reunió ayer a la primera línea cegetista para analizar el duro discurso del jueves de la Presidenta y articular una posición conjunta de la entidad frente a esos dichos, que provocaron un clima de creciente tensión en la relación entre la Casa Rosada y el camionero y habilitaron fuertes especulaciones sobre una ruptura en la alianza política que ambos sectores consolidaron el los últimos años. Fuentes sindicales confiaron que puertas adentro del encuentro, Moyano no ocultó su bronca por el tenor de la crítica presidencial, mientras algunos dirigentes admitieron haberse sentidos “maltratados” por Cristina durante la reunión que mantuvieron un par de semanas atrás con la mandataria.

Sin embargo, el camionero aconsejó a sus pares evitar cualquier réplica hacia el Gobierno y pidió concentrar los esfuerzos en una serie de reclamos cuya definición la entidad exige al Ejecutivo. En esa línea, acordaron insistir con el proyecto de ley de participación de las ganancias, a pesar del pedido de Cristina para negociar ese reparto en las respectivas paritarias, profundizar el reclamo por la suba de las asignaciones familiares y exigir una nueva suba del mínimo no imponible de Ganancias. Además, Moyano dispuso la creación de una comisión especial, integrada por los dirigentes Omar Viviani, Horacio Ghilini y José Luis Lingeri, que tendrá el objetivo de revisar la legislación vinculada con los millonarios fondos que exigen las obras sociales sindicales, para eventualmente después iniciar una demanda judicial contra el Gobierno por los atrasos en su reparto.

(El Cronista Comercial)